Con este aporte, Empresas Públicas de Medellín – EPM busca marcar un hito en la consolidación del Ecosistema de la movilidad eléctrica, por lo cual trabaja para que este tipo de movilidad llegue a otras regiones del país donde tiene presencia
Empresas Públicas de Medellín – EPM amplió a 20 sus Ecoestaciones para la carga pública lenta y rápida de vehículos eléctricos, una refrendación de su compromiso con el cuidado del ambiente, la calidad del aire y el bienestar de la comunidad del Valle de Aburrá, como se le conoce a la zona conurbada de Medellín compuesta por 10 municipios
Este martes 21 de noviembre, se pusieron en funcionamiento tres Ecoestaciones de carga pública lenta, localizadas en el Parque Comercial El Tesoro (la primera de EPM en un centro comercial), así como en Viva Laureles y Éxito Poblado (las primeras en grandes superficies).
Además, de acuerdo con la empresa, de acá hasta finales de diciembre de este año entrarán a operar, de manera escalonada, las demás en los centros comerciales: Santafé, Unicentro, Los Molinos, Florida Parque Comercial, Mayorca (Sabaneta) y Puerta del Norte (Bello); igualmente, en las grandes superficies como Viva Envigado y Viva Palmas, y en otros espacios urbanos de alta afluencia como: Plaza Mayor, Primer Parque de Laureles, Centro de Negocios Milla de Oro y el Mall Río 10.
Jorge Londoño De la Cuesta, gerente de Empresas Públicas de Medellín, destacó esta apuesta como una muestra de la responsabilidad social y ambiental del conglomerado, pues con los vehículos eléctricos hay cero emisiones de dióxido de carbono, material particulado PM 2.5, sulfuro nitrógeno y demás agentes contaminantes, disminuyendo así la concentración de polución en el aire.
“Con esta amplia infraestructura, que permite atender hasta a cinco mil 250 vehículos eléctricos -hoy ruedan cerca de 200 en el Valle de Aburrá-, buscamos promover y consolidar la movilidad eléctrica en la región, tanto en el transporte público como en el particular, pensando en el bienestar de la gente”, indicó el funcionario.
La carga pública lenta se encuentra en lugares donde la gente puede dejar cargando su vehículo mientras adelanta otras actividades, como hacer una diligencia, cenar, ir a cine o realizar compras, con el fin de optimizar su tiempo. En esta modalidad, la recarga toma entre dos y tres horas, según la capacidad de la batería y el modelo del carro.
Por su parte, en las Ecoestaciones de EPM que cuentan con cargadores rápidos, la carga de las baterías del vehículo toma un tiempo máximo de 25 minutos y depende de la carga que se tenga antes de la conexión y el tipo de carro.