El lugar quedará habilitado únicamente para la disposición de residuos provenientes de la construcción.
Con una carga inicial de mil 400 toneladas, comenzó a operar este lunes en Brasilia el nuevo espacio para la disposición de materiales de construcción, ubicado en el área del antiguo basural.
Los primeros vehículos registrados llegaron alrededor de las 7:30 de la mañana para depositar residuos de la construcción civil. En total, fueron 228 viajes realizados por 129 camiones de 57 empresas, que comenzaron a utilizar este espacio para dejar sus escombros.
Con el cierre del vertedero, el lugar se limita a la eliminación de este tipo de material, hasta que se complete la licitación de áreas de clasificación.
El espacio sólo recibe los residuos de la construcción, que deben depositarse en un lugar predeterminado. La admisión se restringe a las personas registradas en el Servicio de Limpieza Urbana (SLU).
Para el comienzo de la operación, las autoridades de Brasilia debieron hacer un proceso de vigilancia para evitar el ingreso de recolectores al lugar. Una vez resuelta la situación por la Policía Militar del Distrito Federal, las unidades de transporte pudieron ingresar.
De acuerdo con las autoridades de la capital brasilera, los interesados en hacer parte del servicio de depósito del lugar, deberán ingresar a la herramienta en línea dispuesta y enviar el control del transporte de residuos (CTR).
«El registro sirve para que la gente sepa exactamente quién recogió, donde recogió y hacia dónde fue», explica Diego Bergamaschi, coordinador del comité y subsecretario de Seguimiento Ambiental y Políticas de Saneamiento de la Secretaría de Infraestructura y Servicios Públicos.
A partir del 15 de marzo, el SLU sólo podrá recibir residuos de la construcción civil para disposición final mediante el resarcimiento de los gastos, por medio del pago de precio público.
Con información de la Agencia Brasilia.