El costo de vida en las ciudades es uno de los asuntos más medidos por organizaciones, centro de gestión de conocimiento y consultoras globales. The Economist presenta su reporte 2018 sobre este tema, donde para esta versión 2 ciudades latinoamericanas son las que más se encarecen.
¿Quiere conocer Singapur? ¿Tiene planes de vivir allí por una oferta laboral? Pues tenga claro que por quinto año consecutivo, el reporte de costo de vida elaborado por Unidad de Inteligencia de The Economist, ubica a esta ciudad asiática como la más cara del mundo.
Para este año los destinos de Asia Pacífico y Europa dominaron las posiciones de las ciudades más costosas según señala en el informe publicado esta semana. En el podio están también París y Zúrich, empatadas en el segundo lugar. Por el contrario, Tokio y Osaka salieron del ranking de los 10 primeros puestos, empujadas por la baja inflación, que sitúa a Japón en los rangos más bajos.
Pero para Latinoamérica las noticias son negativas, ya que las dos ciudades que más subieron en este ranking son justamente de la región: Ciudad de México y Santiago de Chile. La volatilidad en el peso mexicano, reflejando en parte las renegociaciones del Tratado de Libre Comercio (TLCAN), así como el aumento de la inflación en el país, impulsaron a la Ciudad de México a subir 23 puestos desde el puesto 82 del escalafón, ubicándose para este año en la posición número 59.
En Chile, Santiago ha subido en la clasificación a medida que aumenta el precio del cobre, la exportación primaria del país, lo que fortaleció el peso chileno. Es por ello que la ciudad registró una subida de 20 puestos para ubicarse en la posición 66.
En contraste, al examinar las ciudades más baratas, el informe muestra como la segunda ciudad más barata del mundo es la capital de Venezuela, Caracas, que cayó 13 lugares hasta el lugar 132. Pero tal cualidad es engañosa, toda vez que se da en medio de una devaluación de la moneda. El gobierno venezolano unificó y devaluó las tasas de cambio oficiales a principios de 2018 en un intento de reducir la presión de la moneda, pero en medio de la hiperinflación, la moneda sigue estando muy sobrevaluada, como se refleja en una prima extremadamente grande del mercado negro.
Las fluctuaciones monetarias continúan siendo una de las principales causas de los cambios en el ranking. En el año pasado un buen número de mercados ha visto movimientos significativos de divisas, que en muchos casos han buscado contrarrestar el impacto de los cambios con los precios internos.
Cabe señalar que para definir este ranking los investigadores de la Unidad de Inteligencia de The Economist, se dan a la tarea de recopilar los precios de más de 160 artículos en cada una de las 133 ciudades que se incluyen en el estudio. Luego el precio de todos esos artículos recopilados se convierte en dólares corrientes de Estados Unidos, por lo que el tipo de cambio de cada país también tiene efecto en el estudio.