Esta fundación canadiense, que trabaja desde hace 15 años promoviendo la cultura del voto en la juventud de ese país, ahora amplía fronteras y arriba a un país y a una región con altos índices de abstencionismo.
En las más recientes votaciones legislativas en Colombia, más del 50% de los ciudadanos habilitados para hacerlo, se abstuvieron, siguiendo una tendencia prácticamente histórica en este país de Latinoamérica.
Mientras el censo electoral habilitó a poco más de 36 millones de ciudadanos, solamente votaron 17.445.129 personas.
Sumado a ello, según los cuestionarios de Barómetro de las Américas , que hace parte del Proyecto de Opinión Pública de América Latina (LAPOP) señala que, respecto a los jóvenes en edad de votar en Colombia, seis de cada 10 desconfían en las instituciones democráticas. Para completar un panorama desalentador, la encuesta realizada en 2016 indica que el 70 de los jóvenes piensa que a los actores políticos no les interesan sus ideas.
En ese contexto de un país que apenas empieza a emerger de un conflicto armado de más de medio siglo y que requiere fortalecer sus instituciones y la participación democrática; arriba a Colombia el proyecto Voto Estudiantil de la fundación canadiense Civix.
Esta organización civil creada en 2002 “busca fortalecer los hábitos cívicos y democráticos en la población joven con diferentes programas, tanto entre las elecciones como durante las elecciones”, explica Mélissa Gutiérrez, directora del Proyecto Latinoamérica de Civix.
Los jóvenes, la clave de la democracia
Cuando se habla de Canadá en términos de participación democrática, no se tienen en el horizonte las problemáticas que ha vivido Latinoamérica como golpes de estado, dictaduras, supresión de los derechos civiles y compra de votos, por citar algunos.
Sin embargo, Civix nace hace 12 años en este país norteamericano debido a que sus fundadores, detectaron que pese a la estabilidad democrática, en ese momento “la participación democrática estaba bajando especialmente entre los jóvenes de 18 a 25 años”, agregó Gutiérrez.
Magíster en Derecho Internacional, Gutiérrez explica que allí nacieron las iniciativas para cambiar esa tendencia. La estrategia planteada era que si se les enseñaba a los niños la importancia de votar, cuando llegaran a la edad de hacerlo (18 años) ya para ellos será un hábito inculcado.
“Tenemos comprobado que si alguien vota desde la primera vez que puede hacerlo, lo seguirá haciendo y será un ciudadano comprometido”.
Aprender haciendo
La metodología de Civix para que los niños y jóvenes -que están ubicados en dos categorías: entre 6 y 12 años y entre 12 y 18 años-, se conviertan en ciudadanos activos, es la de crear en las instituciones educativas todo un proceso electoral.
“Hacemos elecciones en todos los niveles de gobierno, elecciones municipales, territoriales o provinciales y nacionales. Básicamente es un programa de pedagogía apartidista del proceso electoral”, describe la directora del Proyecto en diálogo con LA Network.
Con base en materiales pedagógicos, actividades de investigación sobre partidos políticos, programas de gobierno y proceso electoral, debates; los chicos se forman para al final del proceso, participar en una votación con los candidatos reales.
Civix entrega los distintos materiales, como cartillas, -todos producidos y adaptados para el contexto territorial en que se desarrollarán las elecciones-, que requiere Voto Estudiantil y con los maestros como intermediarios, adelantan todo el proceso formativo en el que los estudiantes ocupan distintos roles como jurados, testigos, votantes. Al final, todos realizan el escrutinio.
El proyecto en Colombia
Gracias al éxito en Canadá, menciona Gutiérrez, la Registraduría Nacional de Colombia (entidad encargada de los procesos electorales), buscando fomentar la participación ciudadana, contactó hace dos años a Civix para implementar en Colombia su programa Voto Estudiantil.
“La Registraduría también tiene un programa también para fortalecer los hábitos democráticos de los jóvenes en Colombia. Ellos buscaban buenas prácticas internacionales así fue que vieron nuestro trabajo y por ello, por primera vez, salimos de Canadá”, relató la integrante de Civix, organización que tan solo en 2015 logró que 100.000 estudiantes canadienses participarán en las votaciones.
El proceso concreto empezó hace un año con las autoridades de educación de las ciudades de Bogotá, Cartagena Barranquilla y el departamento de Boyacá.
Finalmente en este último estado y la capital de Colombia se decidieron a acoger el programa. Es así como un total de 55 instituciones educativas -45 de Boyacá y 10 de Bogotá-, participan hoy del proyecto que nada menos esta semana que termina y previo a las elecciones presidencial de hoy en Colombia, realizaron sus votaciones.
Además de las tácticas mencionadas anteriormente, Civix también realizó, previo a estas votaciones, el denominado ‘Campamento de la Democracia’, en el que se capacita a los maestros en todos los proceso del proyecto y al que asistieron más de 50 docentes.
En este primer piloto del proyecto se espera que al menos 10.000 estudiantes participen de las votaciones y de esta manera sembrar una semilla democrática en las ciudades y poblaciones de Colombia que de paso sea dicho, se espera sea la plataforma, en el largo plazo, para la expansión del proyecto Voto Estudiantil en Latinoamérica y de esa manera fomentar la democracia en la región.