A través de la figura de la fiducia mercantil, con la que se desarrollará el Plan Parcial Vegas Sur, este municipio impone una nueva manera de desarrollo territorial.
¿Cómo solucionar el reto de contar con los recursos necesarios para desarrollar el territorio municipal sin afectar las finanzas generales? ¿Cómo fomentar y hacer atractiva la participación del sector privado en los proyectos de renovación urbana?
Pues la administración municipal de Envigado, en cabeza del alcalde Raúl Eduardo Cardona González y con base en el trabajo de su Departamento Administrativo de Planeación, dirigido por el ingeniero Esteban Salazar Ramírez; parecen haber hallado la fórmula.
Este Modelo de Gestión se aplicó en la estructuración del Plan Parcial Vegas Sur, proyecto de renovación urbana enmarcado en la Centralidad Sur -sector del Polideportivo-, que sumará más de 30.000 m2 urbanizados a esta zona, dejando al final del mismo 80.000 m2 de espacio público efectivo para la ciudad.
“No teníamos un esquema claro de asocio con el sector privado en desarrollo de proyectos urbanísticos sobre todo de renovación urbana. No solo pensando en rentabilidad inmobiliaria sino también enfocado en garantizar el modelo de ocupación de ciudad”, explica el director Salazar Ramírez.
¿En qué consiste ese modelo? Los funcionarios expertos, con ese reto entre manos, llegaron a la Ley 388 de 1997 en la que hallaron instrumentos de gestión asociada a procesos de urbanización, de vivienda de interés social, con el sector privado a través de fiducias. “Y que estas fiducias no estuvieran, por decirlo así, enmarcadas dentro de la contratación estatal sino directamente bajo el régimen privado, lo que obviamente facilita estar con ellos, agilizar todos estos trámites”, detalla el ingeniero.
La fiducia mercantil se convierte así en el mecanismo de gestión para todos los procesos y en el caso ‘Vegas Sur’, obviamente siguiendo el esquema de estudios de prefactibilidad, factibilidad e implementación; el primer paso fue la constitución de un ‘patrimonio autónomo matriz’.
A partir de este fideicomiso se crean unas subcuentas a las que se trasladan recursos de diferentes destinaciones como obligaciones urbanísticas y de plusvalía. “Entonces tenemos recursos para trasladar de obligaciones de espacio público, equipamiento, infraestructura vial y redes de servicios públicos, y también los recursos que recaudamos por plusvalía”, indica el director de Planeación Municipal.
En Vegas Sur por ejemplo, Envigado no contrató los estudios de prefactibilidad. A partir de reuniones con diferentes inversionistas interesados -el Municipio acompaña a propietarios de la tierra-; uno de ellos ofreció hacer la prefactibilidad a riesgo propio, sin recursos de los envigadeños.
Grosso modo, en este modelo adoptado por Envigado, todos los costos que el municipio invierta en un Plan Parcial, en este caso Vegas Sur, son cargas que se incluyen dentro la formulación y una vez se vende el proyecto, estos recursos retornan con los rendimientos financieros que generaría como si estuvieran en una cuenta bancaria o en un fondo de inversión.
Gracias a este modelo de gestión, con Vegas Sur, el Municipio se anota un éxito gigante: con los recursos generados se podrá cancelar cerca del 60 % de la deuda fiscal, evitando endeudamiento por su Plan de Desarrollo y generando solvencia al ente; logros que hacen de Envigado un territorio más sostenible en todas las dimensiones.