Cada tren tendrá una capacidad máxima de 1 500 pasajeros, diez veces la capacidad de un Trolebús o seis biarticulados de Quito.
Dos nuevos trenes del Metro de Quito llegaron a la ciudad, procedentes de España y desde el puerto de Manta fueron transportados para ser ubicados en Quitumbe, en el sector de Talleres y Cocheras, donde permanecían las cuatro unidades recibidas anteriormente. Justamente, el tren que realizó el proceso de pruebas dinámicas en marzo pasado, continúa en el sector de Fondo de Saco, en El Labrador.
En total han arribado siete de los 18 trenes que conforman la flota de la Línea 1 del Metro de Quito. Los demás trenes llegarán periódicamente en lo que resta del año, destacando que el primer tren del Metro de Quito arribó a la capital ecuatoriana en septiembre de 2018.
El costo de la fabricación de los 18 trenes (de 6 vagones cada uno), es de 183 millones de dólares y son financiados a través de un crédito internacional. Los trenes están siendo construidos por la firma CAF (Construcciones y Auxiliar de Ferrocarriles) en España, encargada de desarrollar proyectos para las ciudades de Washington, Ciudad de México, Monterrey, Medellín, Sao Paulo, Caracas y Santiago de Chile.
Cada tren tendrá una capacidad máxima de 1 500 pasajeros, es decir, diez veces la capacidad de un Trolebús o seis biarticulados que circulan en la actualidad en Quito. Cada tren dispondrá de 144 asientos, 24 por vagón. El tiempo de vida útil de los trenes es de 35 años cada uno o 4 500 000 kms.
Los vehículos ferroviarios están dotados de un sistema de información al usuario: letreros electrónicos, avisos sonoros, detección de incendios, etc. Además, están diseñados para atender las necesidades de pasajeros con discapacidad, al contar con espacios específicos dentro de los vagones para sillas de ruedas, asientos preferenciales y avisos sonoros.
