Los árboles fueron plantados en un sector del Parque de los Niños y del Municipio de Vicente López.
Un grupo de estudiantes de dos escuelas de Buenos Aires (Argentina), fue el encargado de plantar mil árboles de diversas especies, entre los que se encontraban ejemplares de Espinillo, Tala, Algarrobo, Sen de Campo, Ombú y Taruma.
“Desde el Programa Escuelas Verdes destacamos el valor de educar para la construcción de un futuro más respetuoso de todas las formas de vida y en armonía con la naturaleza. Incentivamos la plantación de árboles como una herramienta didáctica que promueva la revalorización de nuestros espacios verdes y urbanos”, destacaron voceros de la iniciativa.
Con esa premisa y divididos en pequeños grupos, los estudiantes pusieron manos en la tierra para nutrir de árboles a un sector del Parque de los Niños y del Municipio de Vicente López. Con esta acción, buscan alentar a más compañeros y jóvenes a reestablecer el vínculo con la naturaleza.
La plantación de árboles contribuye con la diversidad biológica. Los árboles, además de generar hábitat para el desarrollo de diversas especies, moderan los efectos de lluvias extremas, absorben partículas contaminantes a través de sus hojas y contribuyen a captar CO2 (dióxido de carbono), purificando de esta manera el aire, entre otros beneficios.
Esta iniciativa de conservación, conciencia y sostenibilidad fue puesta en marcha en conjunto por el Programa Escuelas Verdes, dependiente del Ministerio de Educación e Innovación de Buenos Aires, el Municipio de Vicente López, Participación Ciudadana, la Ceamse, el Ministerio de Ambiente y Espacio Público y la Agencia de Protección Ambiental (APRA).