Flagelo de las muertes por incidentes viales, que dejaron en este país 5.472 víctimas durante 2018, no tiene propuestas concretas para su remedio.
Las seis candidaturas presidenciales en Argentina ya listas para la primera vuelta este domingo 27 de octubre, han obviado dentro de sus propuestas de gobierno para los próximos cuatro años, la grave situación de seguridad vial que vive su país: según el informe preliminar del Anuario Estadístico de Siniestralidad Vial de la Agencia Nacional de Seguridad Vial (Ministerio de Transporte), tan solo en el año 2018 hubo 5.472 muertes.
“Contrario a lo que pasa en Colombia, donde los candidatos deben presentar un plan previo y detallado sobre lo que trabajará en su gobierno, en Argentina solo se menciona, eso es lamentable acá. Es cierto que los seis candidatos ni en el debate, ni en los discursos, han abordado un plan de seguridad vial”, lamentó Javier Soto Mellado, Focal Point de las Naciones Unidas.
El experto recordó que en el par de debates en que se tuvo oportunidad, en las argumentaciones y propuestas de los aspirantes, no se mencionó este aspecto que hace parte de la sostenibilidad de las ciudades, ya que está incluida en la Agenda 2030 pactada por líderes de más de 150 países.
Compromiso este que quedó consignado con los objetivos o metas específicas 3.6, que se enfoca en la reducción de las muertes por incidentes viales en un 50 % para 2020; y la meta 11.2, para cumplirse en 2030 con la consolidación de una oferta amplia de transporte público, pero adicionalmente que esos sistemas de transporte sean seguros, accesibles y con sostenibilidad, lo que incluye por supuesto, el mejoramiento de la seguridad vial con énfasis en poblaciones vulnerables como niños y mujeres.
Hace unos pocos días, la organización local sin ánimo de lucro, Luchemos por la vida, instó por medio de una carta a los candidatos, para que expresaran sus propuestas sobre seguridad vial y abarcaran el mejoramiento de aspectos como el comportamiento de los usuarios en las vías, de la legislación, de la infraestructura vial, del incremento en la seguridad de los vehículos, en la mejora y eficiencia de la participación de las organizaciones no gubernamentales.
Esta semana, la organización por medio de su sitio oficial, expresó la ausencia de una respuesta a su propuesta. “Lamentablemente, ninguno de los candidatos y/o sus partidos respondió, lo cual confirmó lo que ya se venía corroborando en el silencio absoluto de los candidatos sobre este tema en sus apariciones públicas y debates”.
Edwin Salazar, Director Ejecutivo del recientemente creado Observatorio Latinoamericano de Seguridad Vial, adscrito a la también novel Asociación Latinoamericana de Seguridad Vial (Alsev); recordó que Argentina fue uno de los países signatarios del compromiso de la Década de Acción en Seguridad Vial, para la reducción del 50 % de muertes y lesionados por este flagelo, que incluso está comprendida en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
“Por lo tanto es una obligación ética y moral que todas aquellas personas que aspiran a dirigir un país hagan públicas sus propuestas y acciones integradas para preservar la vida de sus ciudadanos en las vías y estas acciones deben ir enmarcadas en los ODS, que son los lineamientos para establecer las políticas públicas”, indicó el experto colombiano en seguridad vial y salud pública, haciendo énfasis en que este problema en Argentina y otros países de la región, “es casi epidémico”.
Soto Mellado, por su parte, recordó que, si bien el gobierno anterior creó la Agencia Nacional de Seguridad Vial (2008) y en el presente mandato se formuló un plan de trabajo, “ninguno de los dos ha tenido un impacto determinante pese a las campañas de seguridad vial”.
Insistió en que, desde ese 2008 por Ley, ya debe estar en la agenda la temática de la seguridad vial, sin embargo, la falta de un trabajo conjunto de todas las instituciones estatales y organizaciones encaminadas al objetivo común de reducir las tasas de víctimas no ha permitido alcanzar las metas.
“En Argentina, en Colombia, pasa lo mismo, las agencias son organismos que trabajan en un tema que los supera y en el que no hay una integralidad de esfuerzos. Esto será así hasta que no se cree un consejo de gobierno como sucede en España con la Dirección General de Tránsito (DGT) que coordina todos los esfuerzos a nivel ministerial”, recalcó el experto argentino.
Si bien las tasas de muertes por incidentes viales se han reducido en los últimos tres años, pasando de 12,8 en 2016, a 12,7 en 2017 y a 12,3 en 2018, el Director Ejecutivo del Observatorio Latinoamericano fue enfático en afirmar que la seguridad vial no ha sido valorada en su real dimensión por los candidatos, pese a que Argentina invierte entre uno y tres puntos de su Producto Interno Bruto (PIB) para atender los impactos de esta grave situación.
“Ello, sin estimar el costo de la tragedia humana y social que hay detrás de las muertes por incidentes viales. Por lo tanto, es una obligación moral de los aspirantes a liderar los países, hacer explícitas a sus ciudadanos y al mundo sus acciones para salvar vidas en la vía”, sentenció.