Cartagena: entre el “Hay” y el “Ay”

derecho_1
LA Network

La distancia es amplia entre la ciudad a la que acceden y disfrutan los turistas y visitantes en eventos como el Hay Festival, y la ciudad real que viven sus habitantes y cuyos indicadores de desarrollo humano y progreso social son  deficientes.

cartagena-de-indias

La ciudad de Cartagena recibe actualmente a centenares de personas, periodistas, intelectuales y artistas para participar en los conversatorios y foros derivados del Hay Festival, uno de los eventos culturales más importantes que se celebran en esa ciudad y en todo el país.

Pero esa Cartagena de la Ciudad Amurallada, de las calles y plazas románticas, de la agitada vida turística y del Hay Festival, contrasta de manera significativa con la ciudad en la que habitan un poco más de un millón de personas todos los días.

Cartagena tiene hoy el peor Índice de Progreso Social (IPS) de las ciudades que mide la Red de Ciudades Cómo Vamos en Colombia. Este índice contempla 48 indicadores reagrupados en 12 componentes y 3 dimensiones: necesidades básicas, fundamentos de bienestar y oportunidades.

En cuanto a la dimensión de Necesidades Humanas Básicas, aunque el puntaje estuvo en 57.4, Cartagena se ubicó en la posición 10, en el que los componentes de nutrición y cuidados médicos, agua, saneamiento básico, vivienda y servicios públicos, presentaron una desventaja relativa con respecto al resto de ciudades.

Uno de los temas más sensibles es el aumento de la tasa de mortalidad infantil que creció en un 18% en relación con 2014, debido al incremento de muertes en niños menores de un 1 año.  A pesar de este aumento, la ciudad cumplió con la meta país de los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM), que se trazó en 16,7 por cada mil nacidos vivos y que Cartagena dejó en 11.

En el tema de saneamiento básico, los déficits mayores de la ciudad están en acceso al agua por tubería y acceso a saneamiento mejorado, mientras que la calidad del agua está en rango medio. Esto representa un tema largamente aplazado en la ciudad y que sigue sin una solución contundente

Mientras tanto, en asuntos de vivienda y servicios públicos, el Índice de Progreso Social evidenció deficiencias en la calidad de la vivienda y el acceso a viviendas adecuadas, mientras se hizo palpable también el deterioro del indicador de la calidad del servicio de energía eléctrica en relación a la satisfacción de los usuarios, que se redujo en un 42% en solo un año.

En el indicador de seguridad personal Cartagena ocupó el puesto número 4 entre las 10 ciudades colombianas medidas. Esta posición fue atribuible a la disminución en 2015 en relación al 2014, del 5% en la tasa de homicidios y del 21% en la mortalidad por accidente de tránsito en la ciudad. Si bien las cifras mejoran un poco, el tema aún preocupa. En Cartagena hubo 273 homicidios en 2015 y 73 muertes por accidentes de tránsito. En relación a este último indicador, hay que decir que es la segunda causa de muerte violenta en la ciudad, siendo homicidios por riña común y riña entre pandillas, la primera causa.

Por último, el IPS también mostró un resultado desfavorable en el componente de tolerancia e inclusión, con un puntaje de solo 4.8 y presentando una variación negativa del 83% con respecto a 2014. Este resultado respondió a la autoevaluación de los cartageneros, sobre si consideran que en la ciudad se respeta a la población desplazada, discapacitada, desmovilizados y LGTBI, cuyo resultados fueron todos negativos Igualmente la ciudad mostró un bajo desempeño en convivencia urbana.

Realidad vs Percepción

Así como la ciudad, gracias al trabajo de Cartagena Cómo Vamos, presenta mediciones basadas en indicadores objetivos como el Índice de Progreso Social (IPS), también recurre a mediciones subjetivas desde la mirada ciudadana para poder cruzar información y tener un equilibrio en la evaluación urbana.

Este jueves fueron justamente presentados en la ciudad los resultados de la Encuesta de Percepción Ciudadana, en la que los propios habitantes de  Cartagena califican la calidad de vida y las oportunidades que ofrece su ciudad.

La encuesta 2016 muestra cómo solo el 34% de los encuestados considera que las cosas en Cartagena van por buen camino, lo que representa una disminución de 11 puntos en relación con el año 2015. Por otra parte el orgullo por la ciudad presentó el porcentaje más bajo en estos once años de medición con un 55%.

Ya en relación con el entorno económico, el 46% de los hogares encuestados percibe que en el último año su situación económica ha mejorado. Además el 30% de las personas en la ciudad se considera a sí mismas como pobres, principalmente en la zona rural. Vale advertir que este porcentaje es alto en comparación con las otras ciudades de la Red Cómo Vamos, donde las ciudades que la secundan tienen un 21% en este apartado.

Un asunto curioso es que, a pesar de que en el Índice de Progreso Social (IPS) el acceso a la vivienda y su calidad salen mal librados, en la Encuesta de Percepción Ciudadana el 82% de los cartageneros dice sentirse satisfecho con la vivienda que habita.

En otros asuntos de hábitat urbano y movilidad, para los cartageneros los factores que más generan el cambio climático son la contaminación del aire por cuenta de los vehículos y la contaminación de aguas, dos temas con los que los ciudadanos están muy insatisfechos en Cartagena.

Un asunto que sí resultó favorable para la ciudad tiene que ver con la movilidad. El porcentaje de personas que siente que sus tiempos de viaje disminuyeron subió del 6 al 28% mientras que quienes sienten que ese tiempo aumentó pasó de 52 a 40%. Este buen resultado está muy relacionado con la óptima calificación que los cartageneros le dan al servicio de Transcaribe. El 62% cree que la movilidad urbana ha mejorado mucho con este sistema de transporte masivo. Y la realidad corrobora esta percepción: En 2015 los cartageneros demoraban en promedio 1 hora 9 minutos para ir de un punto de la ciudad a otro. En 2016, usando Transcaribe, el tiempo promedio de desplazamiento fue de 43 minutos. Es decir, 26 minutos más rápido.

Por último y en materia de seguridad, el 39% de los cartageneros se sienten inseguros en la ciudad y el 32% se sienten inseguros en su barrio. La localidad que percibe mayor nivel de inseguridad es la De la Virgen y Turística con un 37%, seguida de la Histórica y del Caribe Norte con el 32% y finalmente la Industrial y de la Bahía con 28%.

A la luz de los resultados, tanto del Índice de Progreso Social como de la Encuesta de Percepción Ciudadana,  Cartagena tiene aún muchísimos pendientes para garantizar el bienestar y la calidad de vida de sus habitantes. Si bien la derrama económica que dejan los eventos, congresos y certámenes y el propio turismo son vitales para la ciudad, al igual que la imagen internacional, el gran reto que tienen sus autoridades y la ciudadanía es conciliar la ciudad turística con la real. Se necesita fortalecer la institucionalidad, que la gente confíe en su dirigencia política –cuya valoración es muy baja incluso en este último informe- y que los cartageneros pongan de su parte para que los “ayes” sean menores y se pueda decir  con sentido real que en Cartagena “hay” equidad.