La administración distrital y la empresa Metro han sido rigurosas en aplicar los protocolos necesarios para proteger el proceso de cualquier intento de corrupción
Poco a poco, el Metro de Bogotá parece ir tomando forma después de muchos años de ser solo una obra de papel. El alcalde Enrique Peñalosa confirmó que a finales de este año el proyecto quedará contratado para que el Gobierno que llegue a la ciudad no retroceda en lo avanzado.
“Lo vamos a dejar contratado. La Empresa Metro tiene nueve miembros, de los cuales tres son representantes del Gobierno Nacional, tres independientes, con un período de cinco años, y el alcalde solo tiene tres votos, así que no se pueden cambiar las cosas tan fácilmente”, afirmó el mandatario de la capital colombiana.
Actualmente, los grupos empresariales Consorcio Metro de Bogotá; APCA Metro Capital; Consorcio Sunrise; APCA TransMimetro; Consorcio Línea 1 y Unión Metro Capital, pasaron a la última etapa de la licitación para elegir al que se encargará de construir y operar la primera línea del sistema de transporte masivo.
De otro lado, ante las críticas de las últimas semanas, Peñalosa sostuvo que es falso que el Gobierno Santos no quiso dar los recursos para el proyecto metro de la administración anterior. “El estudio que se hizo en esa Administración sirvió para demostrar que el metro como se planteaba no era viable, porque era demasiado costoso. Por eso nunca tuvo un análisis de beneficio-costo positivo y nunca se pudo llevar al Consejo Nacional de Política Económica y Social – Conpes”, concluyó.