Durante 2016, las autoridades de Cali cancelaron 1.391 licencias de conducción por transporte ilegal.
Las autoridades de movilidad de Cali siguen registrando de manera alarmante el crecimiento de casos de transporte informal, que solamente entre los meses de diciembre de 2016 y enero de 2017, registró la suspensión de mil licencias de conducción por ejercer este método de transporte fuera de la legalidad de movilidad en la ciudad colombiana.
De acuerdo con el líder del grupo de gestión de infracciones de Cali, Jair Marín, el hecho de ejercer servicios de transporte público en vehículos particulares es considerado una falta a las normas, por cuanto es un servicio que no está autorizado ni consignado en la tarjeta de propiedad del vehículo, documento que estipula la destinación del automotor a la hora de su compra y generación de matrícula de rodamiento.
Igualmente, el funcionario agregó que los operativos en Cali se intensificarán con el objetivo de apoyar la movilidad y de exigir la legalidad, más teniendo en cuenta que en el 2015 fueron suspendidas un total de mil 534 licencias y en el año 2016 un total de mil 391, por lo que la cifra de este último mes es más que alarmante.
De acuerdo con la norma actual que regula este tipo de ejercicios de transporte en esta ciudad colombiana, este grupo de infractores tendrá suspendida la licencia por un periodo de seis meses; sin embargo, en el caso de los reincidentes en contra de la norma, la suspensión de la tarjeta de conducción podría extenderse por un periodo significativo de hasta 25 años.
En Cali, el transporte ilegal ha sido una problemática que por años se ha salido de control. Allí, en diferentes calles, barrios y avenidas, carros particulares, motos y busetas llevan a miles de personas al día cubriendo diferentes rutas, inclusive, aquellas que acceden hasta los articuladores del servicio masivo de buses MIO.
