La obra fue detallada como “una serie de terrazas apaisadas con hendiduras, voladizos y grutas que recuerda a un Machu Picchu moderno”.
La estructura que desde 2015 se convirtió en el campus principal de la UTEC (Universidad de Ingeniería y Tecnología) en Lima, fue distinguida con el Premio RIBA 2016 como mejor edificio nuevo del mundo.
La obra premiada, fue destacada por la organización del RIBA (Real Instituto de Arquitectos Británicos) como una estructura “diseñada para las personas” que la convierten en un “ejemplo excepcional de arquitectura civil”.
El campus de la UTEC, es una estructura descrita como de terrazas ajardinadas, con aleros, grietas y hendiduras muy similares a las de la histórica ciudad perdida. Además, al poder observarse desde casa aledaño, se convierte en “la más pura y audaz evidencia de la simbiosis que existe entre la arquitectura y la ingeniería”, afirman los jugados del galardón.
Por su parte, Yvonne Farrell y Shelley McNamara, directoras de la empresa de arquitectos irlandesa que se encargó de la construcción del campus, destacaron sobre ella que todo es producto de las “aspiraciones educativas del cliente” que se supieron conjugar con las condiciones del clima de la capital peruana, para lograr esta estructura vertical.
Este enorme y majestuoso campus de la Universidad de Ingeniería y Tecnología, comprende aulas, oficinas y laboratorios que se encuentran suspendidos e insertados en una estructura de hormigón expuesta que junto a su marco, un dispositivo que proporciona sombra, lo convierten en una plataforma a la vista de todos los limeños.
El edificio de UTEC compitió con otras cinco estructuras ubicadas en diversas partes del mundo como el Centro de Arte Contemporáneo de Azores, el Centro Heydar Aliyev de Bakú (Azerbaiyán), el Museo Jumex de México, el Anillo del Recuerdo de Notre Dame de Lorette (Francia), y el Salón de Conciertos y Biblioteca Stormen de Bodø (Noruega).