De acuerdo con la Universidad Nacional, si se mantiene la tasa anual de deforestación de 400.000 hectáreas al año, Colombia será en el próximo siglo un desierto.
El Gobierno de Colombia lanzó la operación Artemisa, que busca proteger los parques naturales de la ocupación ilegal, los cultivos ilícitos y la minería ilegal para avanzar en la lucha contra la deforestación.
Ricardo Lozano, ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible, afirmó que a este ejercicio de legalidad se suma la implementación de pactos de cambio de comportamiento con los colonos que han venido ocupando los parques, para que, a través del acompañamiento de Parques Nacionales Naturales, puedan realizar actividades de bajo impacto para la protección de estos ecosistemas.
“Por primera vez implementamos un Consejo Nacional de Lucha Contra la Deforestación. Estamos apostándole a la articulación de todas las entidades del Estado, entidades de control y Corporaciones Autónomas Regionales para hacerle frente a este flagelo”, puntualizó.
Lozano recordó que el Parque Nacional Serranía de Chiribiquete es patrimonio natural y cultural de la humanidad y ha sido nombrado la Maloca del Jaguar, por lo tanto, su protección y conservación son prioridades para este Gobierno. El Parque, ofrece el 30 % de la oferta hídrica a la cuenca del Amazonas y más de 70 mil millones de metros cúbicos al río Amazonas.
En Colombia “no está permitido que se ocupen los parques nacionales de manera ilegal”, aseguró el ministro Ricardo Lozano, pues desde 2017 se viene presentando este fenómeno, anclado a la implementación de actividades como extracción de minerales, cultivos ilícitos y tráfico ilegal de fauna, flora y madera. El Gobierno colombiano recuperó 120 hectáreas de bosque en el Parque Nacional Natural Serranía de Chiribiquete, ubicado en los departamentos de Guaviare y Caquetá.