El E-Lab de la Empresa Metropolitana de Transportes Urbanos de São Paulo se nutre de la experiencia de los pasajeros: “ellos conocen los problemas mejor que nosotros”. Solo así se podrá mejorar cada vez más la experiencia en el transporte masivo.
El reciente encuentro de los expertos en buses en Latinoamérica, Busworld Latinoamérica, que reunió a autoridades de transporte, fabricantes, empresarios, expertos y académicos, tuvo como hilo conductor una pregunta que trae de los cabellos a todos los actores de la movilidad sostenible y en especial del transporte público urbano: ¿por qué los pasajeros se bajan de los sistemas de transporte masivo o no los usan?
En ciudades como Medellín (Colombia) con un buen sistema masivo integrado de transporte (metro, tranvía, sistema BRT, cables, buses integrados e incluso sistema público de bicicletas); las motos y el vehículo particular siguen mordiendo gran parte de la torta de pasajeros: mientras el metro transporta diariamente un millón de pasajeros, por la ciudad se movilizan más de 700.000 motos.
Y es que además, los sistemas de transporte público siguen siendo bastante costosos: las ciudades deben invertir millonarios recursos en infraestructura y subsidios al transporte. Mientras tanto, los operadores hacen esfuerzos para mantener la operatividad (renovación de equipos y mantenimiento) en medio de angustias financieras.
Frente a esa situación, la Empresa Metropolitana de Transportes Urbanos de São Paulo (EMTU) con su Colegio de Innovaciones, desarrollaron el E-Lab (Laboratorio de Experiencias) en el que trabajan para desarrollar innovaciones para aplicar en el transporte público, en especial en las rutas metropolitanas de la ciudad que son las que la EMTU opera.
Cristiane Profiti, arquitecta y urbanista que lidera el Departamento de Proyectos de Movilidad Metropolitana, explicó que hay un cambio de paradigma en el que los principales aportantes de ideas para solucionar los problemas del transporte público son los propios usuarios y no solo los expertos y académicos. Reconoció que difícilmente se llegará un día a operadores de transporte auto sostenible “pues tan solo el tema de la infraestructura es insuperable sin los recursos de las ciudades”.
Por otra parte, “El tema del transporte es muy complejo pues estamos en la era de compartir todas la cosas (el carro compartido, las bicicletas etc). Y tenemos que trabajar integrados desde todo punto de vista, como nosotros tenemos que dialogar con todos nuestros stakeholders (grupos de interés) como alcaldes y hacerlo bien, pues así debemos integrar el conocimiento de los pasajeros”, señaló Profiti.
Explicó que si los pasajeros se están saliendo de los sistemas es porque se les está ofreciendo algo mejor. Explicó que incluso con los aplicativos actuales, un usuario ya puede saber qué medio de transporte le resulta más económico en determinado trayecto y con esa información toma la decisión final de cuál modo usará.
“Eso no significa que los usuarios se van a salir de los sistemas, del metro, del bus, no. Significa que el usuario tiene el poder de decidir qué modo usa determinado día”, explicó Profiti. Agregó que de allí es que surge la perspectiva del E- Lab de retroalimentarse de las experiencias de los pasajeros.
Señaló que los expertos van respondiendo a los retos de las necesidades del transporte y los usuarios “pero quien utiliza realmente el sistema es el que va a traer la información para resolver el problema”.
En ese sentido ya se trabaja en aplicativos para pagar desde el móvil los tiquetes de los buses y otra que permitirá a los pasajeros de la EMTU chatear dentro de los buses, intercambiar mensajes y otras opciones como intercambios comerciales. A esto se suman otros importantes proyectos de innovación desarrollados en el E-Lab como tecnologías de fuentes de energía limpias como el hidrógeno.
Según explicó Cristiane Profiti, el tanque de hidrógeno ya les está generando rendimientos de hasta 200 kilómetros lo que les resulta bastante auspicioso pero se mantienen estudios para reducir el costo de los repuestos. Igualmente aplicativos para mejorar la sostenibilidad como de medición de emisiones y de operatividad de la flota.
Cristiane Profiti, concluyó advirtiendo que en São Paulo y otras ciudades el vandalismo sobre los sistemas y las infraestructuras, están sumando un valor sobre los costos de los sistemas masivos.
