“Nos parece clave que los ciudadanos sigan informándose, educándose y participando en temas de ciudad. Que el debate sobre la planificación de la ciudad se abra”, afirman los inspiradores de esta iniciativa chilena.
Más de tres mil cruces semaforizados operan en la Región Metropolitana de Santiago de Chile. La mayoría lo hace con “normalidad”, pero pocos son funcionales para peatones y ciclistas quienes están, aparentemente, por debajo de los vehículos en las prioridades de estos cruces.
Además, en una decisión que solo favorece a los conductores de vehículos, el pasado mes de junio el Ministerio de Transporte y Telecomunicaciones, decidió disminuir los ciclos de los semáforos en 1.200 cruces de la Región, especialmente en horas de la noche, buscando evitar delitos que se puedan cometer mientras la luz roja se encuentra ordenando el pare.
Esta reducción de hasta 20 segundos, sin embargo, se ha aplicado a otros tramos del día en los que son los peatones quienes necesitan cruzar a sus trabajos y la luz roja solo les permite un mínimo de 25 segundos para hacerlo, mientras la circulación vehicular se privilegia con hasta dos minutos y 50 segundos para que los carros fluyan.
Ante esta disparidad que se presenta en la capital chilena y su conurbación, un grupo de ciudadanos comenzó a utilizar las redes sociales como herramienta para dar a conocer aquellos #SemáforosInjustos – como ellos los llaman – que no permiten que los peatones tengan una movilidad continua, fluida y segura, en una ciudad en la que más del 40 % de los viajes se realizan de manera no motorizada, de acuerdo con la Encuesta Origen Destino.
“Dilo Tú Mismo es una iniciativa del colectivo New Indie que nació con una sencilla idea comunicacional: denunciar los semáforos injustos en Santiago de Chile, nuestra ciudad base”, destacó Erick Tapia, integrante del colectivo.
Un colectivo que se nutre de lo colaborativo
El comienzo de Dilo Tú Mismo causó impacto. Tras las primeras denuncias, las repercusiones no tardaron en llegar, y como ellos mismos destacan “de manera natural la gente comenzó a subir fotos a sus redes sociales comentando sobre dicho semáforo (el primero etiquetado) y así la idea fue tomando cuerpo”.
Y como esta idea es colaborativa, la ayuda mutua entre los integrantes del colectivo y los ciudadanos, se convirtió en la base para que se fuera haciendo más fuerte el ejercicio ciudadano en favor de remarcar aquellos semáforos que no tuvieran ciclos propicios para todos los actores viales.
“Uno de los integrantes del equipo trabajaba en ese sector del primer semáforo señalado y le tocaba cruzar por ahí todos los días. Y en ese recorrido observó que la situación era poco amigable para los peatones, sobre todo para adultos mayores, o personas con movilidad reducida. Luego se denunciaron otros semáforos cercanos y el municipio (Las Condes) comenzó a responder con el ánimo de mejorar la situación”, agregó Tapia.
Estos casos se fue convirtiendo en vox populi y no tardó en ser la prensa local la que se encargara de anunciar sobre un grupo de ciudadanos preocupados, que se habían dado a la tarea de marcar con un adhesivo y un numeral, los semáforos que no estuvieran sincronizados en concordancia con las necesidades de los peatones.
Ciudadanos que buscan una ciudad para todos
Pero, más allá de la notable visibilidad de una situación, un evidente problema y una obvia necesidad que ha generado respuesta, los integrantes de Dilo Tú Mismo y New Indie buscan que algunos acuerdos nacidos de esta iniciativa colaborativa permitan soluciones y las municipalidades se reporten con acciones concretas para mejorar los cruces semafóricos.
“Inicialmente la idea es hacer visible la situación y con la ayuda de las redes sociales amplificarla. Fue una grata sorpresa que los municipios comenzaran a responder, como en el caso de Las Condes, que gestionaron la modificación de los tiempos de algunos semáforos del eje Apoquindo”, comentó Erick Tapia.
La respuesta provocó que días después la Unidad Operativa de Control de Tránsito (UOCT) modificara los tiempos de varios semáforos gracias al ruido generado y a una publicación sobre la movilización ciudadana en redes que realizó el diario local La Hora. Además, sirvió para que desde el colectivo, la idea de cruces más seguros, siguiera creciendo.
“Hace pocos días reactivamos la iniciativa bajo la temática #CrucePeligroso que fue el segundo tema más denunciado en un periodo piloto que hicimos posterior al nacimiento de la idea. El objetivo es visibilizar problemáticas que están presentes en los recorridos habituales de los ciudadanos, enfocando específicamente en los viajes que se realizan caminando o en bicicleta. De esta manera, colaborar en levantar información que sea útil para los gobiernos locales”, agregó el activista Tapia.
Para lo que viene, el grupo de Dilo Tú Mismo busca masificar la información y reacciones que están encontrando en las calles santiaguinas, buscando darle buen uso a la información que se pueda levantar. “Creemos que es clave que la ciudadanía sea participe en la construcción de ciudad, y de alguna forma buscamos ser una herramienta o canal para hacerse escuchar”, remarcan.
Su desafío es que el tema no quede solo en denuncias de redes sociales y pueda transcender hasta los tomadores de decisiones, quienes pueden actuar sobre las problemáticas de la movilidad. Igualmente, poder colaborar con las situaciones similares de otras ciudades latinoamericanas a través de una propuesta que será presentada en el Foro Mundial de la Bicicleta en Quito en 2019.
“Nos parece clave que los ciudadanos sigan informándose, educándose y participando en temas de ciudad. Que el debate sobre la planificación de la ciudad se abra. Que las decisiones de las autoridades consideren la opinión y necesidades de la gente, que sean para el bien común, y en ese sentido es evidente que seguir privilegiando el uso del automóvil no es el camino”, sentenció Tapias.