El cambio climático podría afectar significativamente las carreteras de Latinoamérica, según CAF

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LA Network Ciudades
19 octubre, 2018 - Hábitat y Desarrollo Urbano

La entidad propone un procedimiento de trabajo basado en una serie de escalones que deberán concluir en carreteras resilientes al clima y seguras para el transporte.

Ya hay aval para la Carretera Santa Cruz – Buena Vista, en Bolivia
Foto: Archivo LA Network

Una nueva guía publicada por el Banco de Desarrollo de América Latina – CAF, reveló que las carreteras de América Latina no están suficientemente preparadas para enfrentar el cambio climático y propone una serie de medidas de adaptación a corto, medio y largo plazo, para disminuir y prevenir los daños ocasionados por el clima en las conexiones viales.

El documento contempla tanto las carreteras de nueva construcción como la red vial en servicio, y propone medidas basadas en dos pilares: la planificación estratégica, que implica crear marcos institucionales, legales y sociales adecuados; y medidas específicas que incluyen buenas prácticas de ingeniería para el diseño y construcción de infraestructuras más resilientes.

De acuerdo con Antonio Silveira, Vicepresidente de Infraestructura de CAF, “para tener carreteras seguras y resilientes al clima, en los próximos años será imprescindible definir estrategias transversales que permitan adaptar nuestras infraestructuras al clima durante todo su ciclo de vida, y promover el uso de buenas prácticas en los proyectos de carreteras”.

El funcionario enfatizó que la publicación también alerta que, si la planificación y el diseño de las carreteras continúa realizándose ateniéndose tan solo a las prácticas habituales de ingeniería en la región y a los datos históricos existentes, es muy probable que no sea posible dar respuesta a los eventos climáticos que vienen sucediéndose en los últimos años y que, previsiblemente, se repetirán en el futuro.

La guía presentada por CAF además detalla que la situación actual en América Latina y el Caribe presenta una cierta heterogeneidad entre los países que la conforman. Mientras que algunos han comenzado a desarrollar planes de adaptación, otros se encuentran en fases muy incipientes, aunque se reconoce, en la generalidad, la necesidad de actuar en este ámbito en todos los países de la región.