El Movimiento por la Calidad del Agua afirma que ya son seis años denunciando inoperatividad en las plantas que depositan sus aguas en este Embase.
Las más de tres millones de personas quienes se abastecen del embalse Pao Cachinche, que sirve mayormente a la población del Área Metropolitana de Valencia, Venezuela, estarían en riesgo ante una nueva denuncia por la contaminación en este caudal.
El constante vertimiento de cloacas, pesticidas, agua residuales e industriales, continúan afectando a las aguas que son bombeadas a la planta de potabilización Alejo Zuloaga desde donde se distribuye hacia Valencia y otros municipios de estados como Carabobo.
La contaminación, estaría llegando ya hasta el afluente del Lago de Valencia, otra de las cuentas que sirve a la población de esta ciudad.
La denuncia, publicada por el dirigente de Carabobo, Carlos Graffe, afirma que mientras la gente se sigue afectando con enfermedades e inundaciones, Hidrocentro, la empresa encargada del Embalse, insiste en negar las problemáticas.
Igualmente, afirma Graffe, tras las lluvias que se presentan en esta zona, las inundaciones y desbordamientos se acrecientan debido a la falta de mantenimiento en ríos y caños de aguas negras, que finalmente encuentran su destino en el embalse.
Ya en 2015, funcionarios de Hidrocentro comenzaron a suministrarle oxígeno al Embalse por medio de aireadores, buscando devolverle algo de vida a esta reserva de agua que, según quienes la circundan, se avisa sólo por sus fuertes olores.