El actual alcalde de Ciudad de Panamá ha sido un político innato. Como estudiante de Derecho en la Universidad de Panamá e influenciado por el ejemplo de su madre, una profesora universitaria y activista política por los derechos de la sociedad civil, fundó en 1986 un movimiento denominado «Conciencia Joven», que hacía activismo contra la dictadura militar del general Manuel Antonio Noriega. Un año más tarde por cuenta de ese activismo sería arrestado, pasando cuatro días en la prisión más inhumana que ha tenido el país: la Cárcel Modelo.
Blandón ingresaría ya en la política partidista en 1994, al ser electo primer suplente del legislador del Partido Panameñista, Marco Ameglio, en representación de los corregimientos de Ancón, Bethania, Bella Vista y Pueblo Nuevo.
En las elecciones de 1999 fue electo como legislador y se mantuvo en esa posición hasta 2010. Ese año tendría el primer vínculo con Ciudad de Panamá, al ser designado asesor del entonces alcalde Bosco Vallarino.
En 2013, siendo contradictor del presidente panameño Ricardo Martinelli, fue electo como el candidato a alcalde por el distrito de Panamá con más del 97 % de los votos.
Ya en las elecciones generales de 2014 obtuvo la victoria con 147 mil votos con los que superó a José Luis Fábrega del PRD y a la alcaldesa de ese momento, Roxana Méndez, que quedó en el tercer lugar.
Recién inició su mandato visitó las ciudades de Guayaquil (Ecuador) y Medellín (Colombia), para conocer de cerca sus buenas prácticas derivadas de la continuidad política. De ambas ciudades quiso aplicar aquello más necesario para su ciudad. Ya la municipalidad, por ejemplo, cuenta con un sistema de video vigilancia para mejorar la seguridad y ha concentrado sus esfuerzos en la recuperación del espacio público y del centro histórico.
Lógicamente en estos procesos no siempre hay consenso. Blandón fue recientemente denunciado por el Sindicato Nacional de Buhoneros, trabajadores de la economía informal que laboran en las calles de la ciudad, por presuntos pagos irregulares a buhoneros que fueron reubicados. A pesar de episodios como éste que deberá esclarecer la justicia, los cambios en el espacio público de la ciudad ya se ven y los ciudadanos valoran la gestión de Blandón.
Él mismo reconoce que para su trabajo ha sido clave la inclusión de la ciudad en el programa de Ciudades Emergentes y Sostenibles del Banco Interamericano de Desarrollo BID. Tiene claro también que aún falta mucho para que la ciudad puede ostentar ese título, especialmente en lo concerniente a la movilidad y al manejo de los residuos sólidos. A Blandón se le reconoce sensibilidad por los temas ambientales. Desde joven y en el exilio perteneció a un colectivo ambientalista en la Universidad de Puerto Rico. Así que la inquietud por el tema le fluye naturalmente. Su vicealcaldesa Raisa Banfield, arquitecta y ambientalista, comparte esa sensibilidad.
José Isabel Blandón ha manifestado su intención de aspirar a un segundo periodo como alcalde. Tiene claro que los proyectos de largo plazo que pretende no se ejecutan en 4 años. Por lo pronto en 2019, Ciudad de Panamá tendrá cuatro desafíos que él quisiera encarar: la Jornada Mundial de la Juventud en enero con la presencia del Papa Francisco; la designación como Capital Iberoamericana de la Cultura por parte de la Unión de Ciudades Capitales Iberoamericanas (UCCI); el desarrollo de toda una política pública en consonancia con el ingreso a la Red de Ciudades Creativas de la UNESCO y la designación como ciudad gastronómica y lo más importante: la definición de todos los actos conmemorativos de los 500 años de fundación de Ciudad de Panamá.
Además, en 2022, la capital panameña será sede de los Juegos Centroamericanos y del Caribe, para los que ya se está preparando y ha firmado un convenio con la ciudad de Barranquilla, que será la sede este 2018.
Blandón ha mencionado en algunos medios de comunicación que aspira a ser candidato presidencial en 2024, pero que primero quiere dejar una ciudad a escala humana, que se pueda caminar, con un centro histórico renovado y respetuosa del medio ambiente. Si lo logra, seguro tendrá grandes posibilidades de dar el salto el primer cargo de la nación. A veces la política tiene otros tiempos y ese salto puede darse antes de lo planeado, pero a Blandón le gusta el largo plazo y quiere transformar la ciudad.
