La no calle
En las zonas residenciales de la ciudad percibo que en verdad la calle no existe, hay unicamente vías de comunicación en intersección entre varios conjuntos de residencias, todos cercados por altos muros, alambres eléctricos en el tope, cámaras de seguridad y un guarda uniformado y armado haciendo rondas en moto, pero no hay calle, no hay espacio de interacción social, de expresión de cada habitante de su manera de vivir, la soledad es su constante pero al tiempo no nos sentimos solos porque adivinamos que muchos ojos nos están observando, registrando, analizando, catalogando y judicializando.