Durante 2017 la capital boliviana atendió 156 casos de violencia sexual, de los cuales 38 terminaron con sentencia.
Esta fue la conclusión a la que llegaron académicos bolivianos reunidos en La Paz durante el foro “Guardianes de la Academia”, un espacio de reflexión sobre la problemática de la violencia contra la niñez y adolescencia que vive desde hace un tiempo la capital boliviana.
En el encuentro, entre otras cosas que se presentaron, los representantes universitarios se comprometieron a aunar esfuerzos para combatir este flagelo y abrieron la posibilidad de impulsar la formación de especialistas en la temática.
El compromiso, destacó la secretaria paceña de Desarrollo Social, Rosmery Acarapi, involucra la voluntad de las universidades para modificar currículos de las diferentes carreras, tanto en la Universidad Mayor de San Andrés – UMSA y la Universidad Católica Boliviana – UCB, y tener desde las aulas personas con capacitadas para la prevención de la violencia específicas contra menores.
La Funcionaria, recordó que durante el año 2017 la capital boliviana recibió más de 7.500 denuncias de vulneración de los derechos de niñas, niños y adolescentes. De otro lado, fueron atendidos 156 casos de violencia sexual, de los cuales 38 terminaron con sentencia.
“Un mayor porcentaje de casos atendidos se refiere a violencia psicológica e incumplimiento de la asistencia familiar; adicionalmente, también tenemos casos de violación a niños y niñas, 147 casos se han registrado en nuestras defensorías de la niñez y adolescencia”, agregó Acarapi.
Finalmente, el director de la carrera de Derecho de la UMSA, Javier Tapia, puso a disposición del Gobierno de La Paz el consultorio jurídico de esta instancia universitaria, con el propósito de fomentar la denuncia y agilizar la atención de casos prioritarios que involucren violencia contra con menores.