Los trenes, claves para combatir el cambio climático

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René Albisser
27 julio, 2021 - Movilidad
Foto: White House

Recientemente medios de comunicación internacionales reseñaban cómo Francia y Alemania ya han tomado la decisión de recuperar viejas líneas ferroviarias para afrontar el cambio climático y reemplazar aviones por trenes eléctricos.

En Alemania, por ejemplo, la empresa Lufthansa desplegó la iniciativa Lufthansa Express Rail, que implica que los ferrocarriles DB Bahn lleguen a 17 ciudades. Ello significa habilitar casi 140 frecuencias diarias. Así la compañía alemana busca conectar de manera inteligente el transporte aéreo con el ferroviario.

Y es que los trenes toman todos los días más fuerza como aliados en la lucha contra el cambio climático, por lo menos en los países desarrollados.

Hace solo tres meses, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció un aumento de los fondos públicos para renovar la red ferroviaria, dentro de su ambicioso plan de inversión en infraestructuras por 2,3 billones de dólares. Un plan con el que busca recuperar la economía luego de la crisis derivada de la pandemia por el COVID-19.

Hay que recordar que Biden fue un usuario frecuente de tren, por lo que recibió en su época de senador el apodo de «Amtrak Joe», debido a los viajes diarios entre Washington y Delaware (donde residía con su familia) y que hizo durante sus 36 años como legislador.

Pero más allá de su afecto por los trenes, el interés del presidente estadounidense de actualizar la red ferroviaria y expandir las rutas es duplicar la reducción de los gases de efecto invernadero, uno de los compromisos suscritos por Estados Unidos en el Acuerdo de París.

Recientemente el país se reincorporó a ese pacto global para luchar contra el cambio climático, luego de que, durante sus cuatro años de mandato, Donald Trump, hubiera retirado a Estados Unidos y hubiera negado el cambio climático con el apoyo de políticos y empresarios republicanos.

En la misma dirección, y ya lo había mencionado en una columna anterior, el Parlamento Europeo designó este año como el Año Europeo del Ferrocarril, una decisión relacionada con los esfuerzos de la Unión Europea para promover formas de transporte sostenibles y lograr la neutralidad climática para 2050 a través del Pacto Verde Europeo.

América Latina también puede sumarse a la iniciativa de estos países desarrollados de promover los sistemas ferroviarios como un elemento clave para combatir el cambio climático. Sin duda, habrás menos fondos, menos recursos económicos, pero puede haber algo que es esencial: decisión política, compromiso. Hay que repetir y repetir las bondades del transporte ferroviario, para convencer a los tomadores de decisión en nuestra región, de que los trenes nos pueden ayudar a tener mejores ciudades y, además, a impulsar la carbono neutralidad.

Hasta pronto y gracias por su lectura.