Luis Revilla entró a la política siendo aún muy joven para unirse con el abogado y político Juan del Granado. Cuando este último ganó las elecciones municipales para alcalde de La Paz en el año 1999, Revilla lo acompañó como concejal por el Movimiento Sin Miedo.
El partido de Revilla firmaría una alianza en 2006 con el Movimiento al Socialismo (MAS) del presidente Evo Morales, pero posteriormente ambos partidos tuvieron una ruptura muy sonada y se convirtieron en rivales el año 2009.
La ciudad de La Paz, que era una de las ciudades que apoyaba mayoritariamente al presidente Morales, se mantuvo bajo el control del movimiento de del Granado y Revilla. Precisamente él ganaría las elecciones en 2010 venciendo a Elisabeth Salgueiro, la candidata del MAS.
La relación entre Revilla y Evo Morales no ha sido del todo buena. El propio Revilla ha reconocido ante los medios de comunicación que tiene con el Ejecutivo una relación dual, en la que “sostiene un buen nivel de coordinación con el ministro de Gobierno, Carlos Romero”, pero que en otras instancias del gobierno central han puesto permanentes obstáculos para ordenar la ciudad.
A pesar de ello, Revilla tuvo una notable gestión en su primer periodo que le permitió ser reelecto en 2015 con el 58 % de la votación y con su nueva agrupación política Soberanía y Libertad (SOL.bo).
Hoy Revilla goza de una aprobación relativa por parte de la ciudadanía, de acuerdo con la Encuesta de Percepción Ciudadana realizada por el Observatorio La Paz Cómo Vamos de diciembre de 2017. El 68 % de los ciudadanos encuestados confía mucho en el gobierno municipal, mientras que casi el 26 % considera buena la gestión de Revilla, 43,2 % la califica como regular y un 22 % como mala. La inseguridad en la ciudad es el asunto de mayor preocupación de los ciudadanos y que más castiga la imagen del gobierno.
De todos los programas y acciones que realiza el gobierno municipal, el servicio que cuenta con la mayor aceptación de la ciudadana es el bus Puma Katari que fue implementado a partir de la preocupación de Revilla por hallar una solución al problema del desorden vehicular y de transporte en la ciudad. Por todos las bondades que ha evidenciado el sistema, el 69.3% de la población considera que el Puma Katari es la solución al problema del tránsito que aqueja a la ciudad.
La ciudadanía también valora y aprueba el esfuerzo y el trabajo que realiza el Gobierno Autónomo Municipal de La Paz para mejorar los servicios básicos en el municipio, ya que ha permitido incrementar la calidad de vida de los habitantes.
La transparencia con la que se manejan los gastos del GAMLP es otro de los puntos con aprobación por parte de la población. Desde años pasados, la ciudad incentivó a la rendición pública de cuentas a través de diversos mecanismos como las audiencias vecinales. En ellas, el vecino tiene la posibilidad de conocer y cuestionar los gastos que realiza el municipio en su macro distrito y zona.
Antes estos buenos resultados de su gestión, Revilla quiere dar el salto nacional. Ya anunció su intención de ser candidato presidencial independiente en 2019, alejado del actual bloque de partidos opositores a Evo Morales. Eso sí, tendrá que definirse en el país el caos que ha provocado la insistencia de Morales de presentarse nuevamente como candidato presidencial, irrespetando así el referendo que hubo el 21 de febrero de 2016 y que le prohibió una nueva postulación. Este asunto aún no está claro en el país, pero Revilla sí parece tener claras sus aspiraciones. Y parece no tener miedo de enfrentar a Evo si este insiste en su intención.