La capital nicaragüense viene acumulando problemas especialmente en lo relativo a la falta de normas medio ambientales.
La conclusión surge luego de un estudio que comprende más de 45 años sobre el orden territorial de Managua, realizado por el ingeniero y exdirector de Ordenamiento Territorial del Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales (Ineter), Luis Zúñiga Mendieta y plasmado en su libro Proceso de Ordenamiento y Desarrollo Territorial en Nicaragua.
De acuerdo con el autor, el Plan de Ordenamiento de Managua se debería instaurar como una política pública que evite que el territorio se siga expandiendo hasta cada vez más cerca de lo que antes fueran sus fronteras medias.
Actualmente y por un plazo de 18 meses, la Agencia de Cooperación Internacional del Japón (JICA) se encuentra en el proceso de elaboración del plan maestro de ordenamiento territorial de Managua y su área metropolitana, con el que se espera puedan aliviar situaciones que se producen derivadas de la falta de planificación.
Tras la terminación del plazo para la JICA, el documento del plan de ordenamiento será socializado con los ciudadanos para que entre todos se comience a construir la sostenibilidad futura de la ciudad.
Actualmente, Managua con casi millón y medio de habitantes, viene acarreando problemas como el manejo inadecuado de desechos sólidos, la ausencia de normas claras y aplicación de leyes en relación con el cuidado del medio ambiente, la deforestación, la contaminación, y el exceso de población que para el 2050 sería el 27% de la totalidad de Nicaragua.
