El proyecto tiene presupuestado el comienzo de un proceso de monitoreo y restricción a ejecutarse entre abril y agosto.
El pasado mes de agosto, el Consejo de Ministros aprobó el Plan de Descontaminación de Valdivia (Chile) que comenzaría a ejecutarse a comienzos de 2017 y por medio del cual lograrían avanzar en la tarea de contrarrestar los altos niveles de polución que se vienen presentando en la ciudad.
Sin embargo, el proyecto sigue represado en los escritorios de la Contraloría a la espera de una aprobación para que se comience a ejecutar, mientras que los ciudadanos siguen viendo como las nubes de humo se posan sobre ellos.
Mientras tanto, Carla Peña, secretaria Regional Ministerial (Seremi) de Medio Ambiente, afirmó a medios de comunicación que desde la dependencia que representa, el Ministerio de Medio Ambiente, ya se han llevado a cabo las obligaciones en los plazos estipulados y la espera depende exclusivamente de las definiciones que se deben tomar en la Contraloría.
Este paso de la Contraloría frena de manera sustancial el ideal de los habitantes de Valdivia por comenzar a ver la ciudad limpia de polución, por cuanto es un paso obligado antes de que el proyecto pase a firma presidencial para su publicación y posterior aplicación.
Este Plan de Descontaminación, con el cual esperan erradicar la problemática y evitar las constantes ejecuciones de planes de alerta sanitaria, fue planteado en cuatro ejes fundamentales que son: recambio voluntario de calefactores, planes de aislación térmica en 18 mil viviendas, mejor uso de la leña y la modificación de la Alerta Sanitaria a Gestión de Episodios críticos.
