Esta unión busca eliminar nueve mil toneladas de material contaminado y más de 150 mil toneladas de basura marina.
Los gobiernos de Antigua y Barbuda, Barbados, Belice, República Dominicana, Guyana, San Cristóbal y Nieves, Santa Lucía, Surinam, y Trinidad y Tobago, unieron sus esfuerzos para frenar la contaminación por productos químicos y desechos tóxicos a través de una nueva iniciativa global apoyada por el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente y el Fondo para el Medio Ambiente Mundial (GEF).
La iniciativa, llamada “Implementación de un desarrollo sostenible bajo en químicos en los pequeños Estados insulares en desarrollo”, aspira a transformar la gestión y la eliminación de los productos químicos y desechos nocivos en Estados del Caribe y de los océanos Índico y Pacífico, con un presupuesto global de 450 millones de dólares.
El ministro de Desarrollo Sostenible de Santa Lucía, Gale Rigobert, enfatizó antes del lanzamiento la necesidad de tecnologías sostenibles para el tratamiento de residuos en las naciones isleñas, y destacó que en los pequeños Estados insulares en desarrollo se generan diariamente 2,3 kg de desechos por persona, 48 % más que el promedio de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
Agregó, que el manejo de desechos es un tema de creciente importancia para las naciones isleñas a nivel mundial, las cuales tienen poblaciones en crecimiento, un rápido desarrollo y cantidades cada vez mayores de bienes importados, que ejercen presión sobre las capacidades locales para el manejo y la eliminación segura las sustancias tóxicas y contaminantes.
El proyecto evitará la acumulación futura de productos químicos en el medio ambiente, garantizará la gestión y eliminación segura de las sustancias nocivas y promoverá el consumo sostenible a través del enfoque de la circularidad.