Buenos Aires dejó atrás los problemas del relleno con el Centro de Reciclaje de Villa Soldati

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LA Network Ciudades
22 mayo, 2017 - Ecología Urbana

Para este 2017 la planta siguió dándole valor a la labor con la puesta en marcha del primer centro verde automatizado presente en Buenos Aires.

Planta de tratamiento en Varela. Fotos Andrés P. Moreno / prensa GCBA

El Centro de Reciclaje de Villa Soldati, en Buenos Aires, se convirtió desde hace cuatro años en la alternativa de la capital argentina para destinar y manejar de manera más adecuada sus residuos áridos, orgánicos, forestales y plásticos PET que antes eran enviados al relleno de la ciudad o algunos, incluso, eran dispuestos de manera ilegal.

En 2013, comenzó a funcionar el Centro de Reciclaje de Villa Soldati, en principio con su planta de áridos (residuos de la construcción). Desde entonces su capacidad fue ampliada y hoy ya suma otras tres plantas: poda, orgánicos y plásticos PET, que le permiten procesar dos mil 500 toneladas diarias de residuos, unas 600 mil por año.

Además, para este 2017 la planta siguió dándolo valor a la labor de tratar de la mejor manera los residuos que se generan en la ciudad, con la puesta en funcionamiento de otra planta llamada MRF, por sus siglas en inglés «Material Recovery Facility», el primer centro verde automatizado presente en Buenos Aires, que permite procesar todo el material seco que viene de las campanas o Puntos Verdes, y hacer una separación automática de papeles, cartones, metales, vidrios y metales no ferrosos.

La ventaja del MRF, de acuerdo con los encargado del Centro, es que tiene una mayor eficiencia en la separación y una productividad muchísimo más grande que un Centro Verde. Igualmente,  permite tratar unas 10 toneladas/hora, cuando en los Centros Verdes es de 20 a 30 toneladas por día.

La puesta en funcionamiento del Centro de Reciclaje de Villa Soldati con sus diferentes plantas tiene varias ventajas como el mayor control sobre la disposición de los residuos: no se descargan de forma ilegal y tienen un correcto tratamiento, además del valor económico ya que el tratamiento de los residuos es mucho más barato que el relleno sanitario.

También, permite la reutilización de elementos que tienen valor, como la poda, los materiales de construcción, botellas y orgánicos; aporta a la reducción del impacto ambiental (huella de carbono) por la puesta en funcionamiento del centro equivale a la plantación de 200 hectáreas de árboles y contribuye al cumplimiento de la Ley de Basura Cero.