El municipio de Sabaneta es uno de los finalistas del reconocimiento “Construyendo Sueños”, en la categoría entre 20.001 y 100.000. Dialogamos con su alcalde.
Desde la alcaldía de Sabaneta, Iván Alonso Montoya Urrego, está empeñado en que el área total de su municipio funcione como un aula educativa, porque, según afirma, sin la participación activa de la gente es difícil encontrarle soluciones a los múltiples y graves problemas que aquejan a los más de 50 mil habitantes de esta acogedora población vecina de Medellín. El ejercicio de la docencia que soporta su actividad política, le llevó a contraer un amplio compromiso con la formación de niños, niñas y adolescentes y con la solución de sus problemáticas.
Señor alcalde, ¿qué es lo que lleva a Colombia Líder a posar su mirada en el plan de desarrollo de Sabaneta?
Somos un gobierno de inclusión que al elaborar el plan de desarrollo tuvo en cuenta a todos los grupos poblacionales, pero en el aspecto generacional le prestó una atención especial a niñas, niños y adolescentes. Con ellos se realizaron unas mesas de trabajo y allí conocimos lo que les gusta, lo que no les gusta y cómo sueñan a Sabaneta. La verdad es que, producto de esas mesas de trabajo, en el plan de desarrollo quedó un capítulo sobre acciones concretas, que lleva por título “Sueños de la niñez”, que es mandato del pueblo para este gobierno y que obliga a todos los funcionarios municipales. O sea que lo nuestro no es un cuento y tampoco lo hacemos para maquillar el discurso. Por eso Colombia Líder nos seleccionó como finalistas de su concurso.
Y, ¿a qué aspira la niñez y la juventud?
En el árbol de problemas está la débil apropiación de la educación, el conocimiento, la investigación, la ciencia, la innovación. Está el desempleo de sus padres y la inquietud de qué vamos a hacer para solucionarlo. Ésta el reclamo de más espacios para la recreación y para el encuentro. Teniendo en cuenta todo ello, el plan de desarrollo está basado en cinco E: educación, equidad, espacio público, entendimiento y emprendimiento. Hoy, toda Colombia puede comprobar que las acciones plasmadas como “Sueños de la niñez” en el plan es una realidad que se están cumpliendo. Además de adecuar el parque principal, antes de finalizar el año estaremos entregando las obras de modernización de otros cinco parques, como lo pidieron ellos.
En realidad, esa es una experiencia de ciudadanía activa.
Sí. Ellos están viendo que la política no es algo etéreo de los mayores, sino que ellos pueden ser partícipes de las decisiones, y que las decisiones se toman en equipo y no por parte de una sola persona o de un alcalde. Y lo que me satisface es que Colombia Líder incluyó como jurados a las universidades del Norte, Jorge Tadeo Lozano y Antonio Nariño.
¿Cómo se ve reflejado en su plan de trabajo el combate contra el abuso y el maltrato a la niñez y a la juventud?
Lo primero que debo decir es que un pueblo educado permite acabar con todos esos flagelos. En Sabaneta han existido y hay hechos de maltrato, infortunadamente. Pero en términos de indicadores ganamos el año, porque nosotros trabajamos absolutamente todo de la mano de la educación. Estamos convencidos de que una niñez bien formada, una adolescencia bien formada, una familia bien formada, siempre trabaja en el esquema de la felicidad. Nosotros tenemos un gobierno infantil basado en esas decisiones. Asimismo nuestras comisarías de familia están muy bien formadas y trabajan por la promoción, por la prevención, por el fortalecimiento del núcleo familiar.
—En la tarea de dignificar la vida y crear condiciones de bienestar para el ciudadano, ¿cuál es su mansaje para los alcaldes de Latinoamérica?
—Como alcalde estuve en Hábitat III y renové el compromiso de que los mandatarios tenemos que trabajar por el presente y por el futuro, que tenemos que dar ejemplo de cuidado con el medio ambiente. De la manera como realicemos nuestro liderazgo y nuestro compromiso con la educación, vamos a poder vivir con una excelente calidad de vida. Sabaneta es un municipio a donde se quiere venir a vivir todo el mundo, por eso nos ha tocado empezar a educar a todo mundo: a los niños, a los adolescentes, a los visitantes, a los constructores. Lo importante es vivir en comunidad, vivir en familia, no vivir solo. A todos los alcaldes de Latinoamérica los invito a que nos visiten y conozcan nuestra experiencia de gobierno.
