La unión de cinco firmas francesas creó esta herramienta en la que se puede recrear con mayor fidelidad y con 11 criterios sostenibles, un proyecto urbano.
Imagine que su ciudad quiere emprender una transformación integral de parte de su territorio y contribuir con él en la construcción de una ciudad sostenible. Sin embargo, por más que los estudios de modelado se acerquen a la realidad, esas visiones siempre representarán una brecha entre teoría y realidad.
Esa distancia la cerró el proyecto Santiago Des3ado, en el que la firma francesa Veolia Environnement, sumada a Artelia Ville & Transport, AS. Architecture Studio, Arte Charpentier y Siradel; que alcanzó la simulación de una área de 350 hectáreas centrales de la capital chilena. Esa recreación se realizó bajo la idea de enterrar su principal autopista, la Panamericana o Norte-Sur para construir sobre ella un gran parque urbano.
Sin embargo, ese propósito tuvo un plus que hace del simulador 3D una herramienta poderosa de planificación para ciudades sostenibles.
“En este simulador utilizamos 11 claves de sostenibilidad que implementamos para verificar cómo hacer este proyecto de la autopista de la mejor manera posible. Empezamos con el escaneo de la ciudad para tener un diagnóstico y cuáles eran los desafíos de la ciudad, cuantificar los indicadores y ver cómo aportaríamos soluciones y mejorar los indicadores de sostenibilidad”, explicó el francés Eric Lesueur, director General de 2EI, la división de Ciudades Sostenibles del Grupo Veolia que concluyó este proyecto en 2015 y que ahora empieza a difundirse en la región.
Con un equipo interdisciplinario, que fue más allá de la integración de ingenieros informáticos y diseñadores en 3D, e incorporó a especialistas en agua, en desechos sólidos, en biodiversidad, movilidad, arquitectos, urbanistas, expertos sociales, etc.; Veolia y sus asociados crearon el simulador 3D.
“Para llevar a cabo un proyecto sostenible una empresa sola no puede aportar todas las soluciones. Tenemos que trabajar juntos y aportar la experiencia y estar a la orden del sector público. Esta herramienta lo puede hacer y lo podemos adaptar a cualquier contexto de ciudad”, indicó Lesueur.
Densidad Urbana, Equidad Social, Economía y Empleo, Conectividad Ciudadana, Identidad de la Ciudad, Naturaleza y Ciudad, Uso de Recursos, Calidad de Vida, Riesgos y Cambio Climático, Seguridad Urbana y Movilidad Sostenible; son los componentes de sostenibilidad que tiene en cuenta el simulador y que permiten visualizar con la mayor fidelidad lo que impactaría una intervención de ciudad.
“¿Cómo tener una visión integrada y operacional que permita la implementación de los proyectos? Hay mucha gente que es capaz de dar una visión conceptual de la ciudad, de su futuro, pero después en la práctica, hace falta de una articulación entre visión y esa realidad, esa práctica de los proyectos urbanos, la implementación de los nuevos servicios”, detalló el Director de Ciudades Sostenibles de Veolia.
Esta modelación se realizó primero con un escaneo de la ciudad para tener un diagnóstico y conocer cuáles eran los desafíos, cuantificar los indicadores. De ese trabajo de 30 expertos franceses, con el acompañamiento de 45 interlocutores chilenos se logró modelar en tercera dimensión un total de 33 km2 en edificios, la representación de nada menos que 5’000.000 de polígonos, más 70 indicadores cartografiados orientados en esos 11 indicadores de sostenibilidad.
Pero esta tecnología que se vislumbra como el futuro en herramientas de planificación sostenible y que fue financiada por el gobierno francés -dos millones de euros-, no se olvidó del pasado para mirar el porvenir. El grupo interdisciplinario tuvo en cuenta, por ejemplo, los antiguos corredores verdes del centro de Santiago que desaparecieron cuando los habitantes de esa zona se trasladaron a las periferias. “Tuvimos que entender cuál era el pasado de Santiago y hacer resurgir la historia patrimonial, su identidad, que hace parte de la sostenibilidad de la ciudad”, destacó Lesueur.
Ahora Veolia ha puesto a disposición de las ciudades latinoamericanas esta nueva herramienta de planificación. Uno de los proyectos más cercanos que podría implementar el simulador es el proyecto de traslado del aeropuerto Benito Juárez de Ciudad de México, a la periferia de la ciudad. “Naturalmente tendrá un proyecto de rehabilitación de la vieja infraestructura que la Fundación Rockefeller quiere utilizar como herramienta de resiliencia para el aeropuerto”, reveló el empresario francés.