Los beneficios sociales del proyecto
Inició la operación del Metro de Quito, el megaproyecto más importante de infraestructura urbana en la historia de Ecuador. Este sistema de transporte público masivo mejorará la movilidad de la ciudad en su eje principal norte-sur con capacidad adecuada para satisfacer la demanda actual y futura. Fue financiado por el Banco Interamericano de Desarrollo junto con otros tres bancos multilaterales: Banco Mundial, Banco de Desarrollo de América Latina y Banco Europeo de Inversiones y fue ejecutado por el Municipio del Distrito Metropolitano de Quito. Los principales beneficios sociales del proyecto, incluyen mejoras al medio ambiente y a la salud de los quiteños, a la productividad y a la generación de empleo local, a la inclusión social, a la calidad del servicio de transporte público y al desarrollo urbano sostenible. En este blog, abordaremos cada uno de estos beneficios.
Créditos: Valeria Heredia y María José Carvajal
Mejoras en la salud por reducción de emisión de Gases de Efecto Invernadero (GEI)
En Quito, el 56% de las emisiones contaminantes provienen del sector transporte[1]. Esta contaminación ambiental es una de las principales amenazas hacia la salud cardiovascular y respiratoria de los 2,8 millones de habitantes de la ciudad. La ciudad se hace más sostenible con el arranque de operaciones del Metro, sistema eléctrico y subterráneo, que tiene alto potencial para disminuir las emisiones de GEI con una reducción promedio estimada de 84.000 toneladas de CO2e anuales[2].
Mejora de productividad por reducción en tiempos de viaje
La ciudad de Quito es una de las más congestionadas en América del Sur[3]. Recorrer la ciudad desde la estación Quitumbe al sur y la estación Labrador al norte, tomaba una hora y cuarenta minutos en hora pico, y actualmente, con la operación del Metro, este recorrido toma treinta y cuatro minutos, un tercio de la duración previa. Esto quiere decir menos tiempo perdido en medios de transporte, y más tiempo de los usuarios ganado para dedicarlo a actividades productivas o tiempo de calidad con sus familias. Por otro lado, durante la construcción se generaron mas de 5000 plazas de trabajo directas, 92% con mano de obra ecuatoriana, mejorando la economía de la ciudad.
Mejora de la inclusión social y la accesibilidad a oportunidades
La población de Quito y las oportunidades urbanas se distribuyen de manera dispersa en el territorio. Mientras que las oportunidades urbanas se concentran en el hipercentro norte de la ciudad, la población de niveles socioeconómicos más bajos se asienta en las zonas más alejadas del norte y del sur de la ciudad. Con el proyecto Metro de Quito, mejora la inclusión y la integración social, pues gran parte de la población tiene ahora mejor conectividad con servicios sociales, equipamientos de salud, educación, zonas de abastecimiento, recreación y empleo en distintos barrios de la ciudad. Además, la infraestructura del proyecto está adaptada a las necesidades de mujeres, personas con discapacidad y grupos vulnerables.
Ilustración 1. Izquierda: Distribución especial de servicios, zonas de abastecimiento y empleo. Centro: Distribución de la población ubicada en el menor nivel socioeconómico (quintil inferior). Derecha: Sistema de transporte público. Fuente: Orellana et al, 2021.
Mejora integral de la calidad de transporte público: comodidad, seguridad y confiabilidad
La calidad del transporte público es clave para promover la movilidad urbana sostenible, pues incentiva su uso por sobre otros medios de transporte más contaminantes y menos seguros. El Metro de Quito transportará a sus pasajeros con mayor comodidad debido al espacio que brinda para cada usuario. Ahora, los niveles de ocupación de los trenes serán presumiblemente iguales o menores a 6 pasajeros/m2 en hora pico[4], inferior a la situación en sistemas BRT y buses convencionales que registran niveles por arriba de 8 pasajeros/m2[5]. Mayor espacio contribuye a la reducción del número de eventos de delincuencia y acoso sexual, para los cuales existen también controles de seguridad y protocolos de prevención. Adicionalmente, el Metro ofrecerá también mayor confiabilidad en sus frecuencias y horarios de operación comparado con otros sistemas en la superficie.
Potencial para incentivar un crecimiento urbano sostenible
La ciudad tiene alto potencial para crecer en altura alrededor de las estaciones del proyecto promoviendo el uso eficiente del suelo. Quito podrá incentivar mayor crecimiento económico y un desarrollo urbano sostenible, además de revitalizar zonas urbanas y recuperar espacios públicos con entornos más accesibles, caminables y seguros para la gente.
Los habitantes de Quito ya se pueden beneficiar de los resultados esperados de este sistema. Ahora, los trenes recorren una ciudad más equitativa y accesible. Existe un impacto positivo en la calidad de vida de millones de usuarios, para quienes el sueño de Metro de Quito se hace realidad.
[1] Municipio del Distrito Metropolitano de Quito (MDMQ), 2015.
[2] BID, 2016 y Metro de Madrid, 2010.
[6] NSC, 2022.
Columna publicada originalmente en Moviliblog de el BID
