Dialogamos con la creadora del sistema de bicicletas públicas de Ciudad de México ECOBICI, Martha Delgado Peralta, quien nos habla de los retos que tuvo para implementarlo y comenta también los buenos resultados obtenidos en 6 años de operación.
Por: Agustín Velasco (Periodista-Colaborador LA Network Ciudad de México)
En febrero de 2010 se puso en funcionamiento el sistema de bici pública en la Ciudad de México. Su creadora, Martha Delgado Peralta, quien entonces era Secretaria del Medio Ambiente de la capital mexicana, cuenta que hubo incredulidad sobre el éxito de Ecobici, la red de transporte alternativo que hoy es capaz de evitar hasta 10 muertes prematuras al año y que le ha ahorrado a esta urbe 65 millones de dólares, de acuerdo con el Grupo de Liderazgo Climático de Ciudades (C40) y el laboratorio especializado en diabetes Novo Nordisk.
¿Cuál es el origen de la bici pública en la Ciudad de México?
En 2007 yo ya había sido diputada local en la Asamblea Legislativa del entonces Distrito Federal, ahí propuse el paseo dominical en bici sobre la avenida Paseo de la Reforma y fue rechazado por todas las fracciones parlamentarias. Ese fue mi primer fracaso, ahí me di cuenta realmente de la complejidad tan grande que podía tener la movilidad en la ciudad, si un simple paseo de seis horas no lo aceptan, imagínate lo que era proponer el sistema de carriles para bicicletas o un sistema de movilidad en bici, sería desafiante. Durante el primer año de gobierno del ex alcalde de la Ciudad, Marcelo Ebrard, la propuesta de movilidad en bici se concentró en la creación de ciclovías por dos razones, primero porque la ciudad ya lo venía haciendo, la administración pasada (2000-2006) dejó construidos unos 100 kilómetros de ciclovías y segundo porque los consultores como ITDP (Instituto de Políticas para el Transporte y el Desarrollo por sus siglas en inglés) lo que nos propusieron fue eso, hacer 400 a 600 kilómetros más; por si fuera poco, la comunidad de ciclistas urbanos (como Bicitekas), también habían presionado desde hacía una década antes para que hubiera infraestructura ciclista. ¡Lo que querían era ciclovías¡
Si la exigencia era la de hacer vialidades para ciclistas ¿cómo migraron a la idea de un sistema de bici pública?
Se dio a partir de un viaje que el jefe de Gobierno hizo a España. Ahí conoció el sistema de bici pública de Barcelona, al volver me comentó sobre ese sistema y nos dimos cuenta que para realmente masificar el uso de la bici se necesitaba una masa crítica de gente nueva que se subiera a pedalear, es decir, en una ciudad tan grande era mucho más fácil que la gente sacara su propia bici para hacer viajes cortos. Decidimos que la manera más indicada era la bici pública, aunque no se dejó de lado la construcción de infraestructura.
¿Hubo resistencia?
¡Las resistencias fueron impresionantes! Cuando propusimos los paseos dominicales y les dijimos que cerraríamos Paseo de la Reforma durante seis horas para que las familias acudieran a andar en bici los comercios cercanos no querían y mucho menos querían la Ecobici, pensaban que iban a perder clientes, los automovilistas pensaban que iban a perder su carril, la oposición decía que estábamos locos, decían “¡eso funciona en París! aquí es el Distrito Federal, se van a robar las bicis”.
¿Tenían estudios para sustentar o para probar que Ecobici funcionaría?
Lo sustentamos en la Encuesta de origen y destino 2007. Teníamos estudios de los impactos que habían tenido en otras ciudades como Barcelona y París. En 2010 cuando la lanzamos, no había ningún otro sistema en el continente americano, sólo en Estados Unidos donde había una ciudad con 100 bicis… hoy, en 2016, hay más de 350 ciudades del mundo que tienen sistemas de bici pública.
¿Cómo empezaron y con cuánto cerraron la administración en 2012?
El 10 de febrero de 2010 se pusieron en funcionamiento 85 ciclo estaciones con mil 114 bicis. Y terminó la administración en 2012 con 285 ciclo estaciones y casi cuatro mil bicicletas.
¿De ese lanzamiento qué es lo que más recuerda?
Había gente que nos decía que no pusiéramos ciclo estaciones en barrios considerados como peligrosos como La Merced, porque las iban a vandalizar, pero decidimos que bajo ningún prejuicio íbamos a detenernos, encontramos muy buena recepción incluso nos ayudaron a decidir dónde instalarlas. En París el primer año que entró en operación su sistema de bici pública se robaron el 40% de las bicis, ante eso nosotros nos preparamos con un stock de reserva por si nos pasaba lo mismo, pero no, no nos robaron ninguna. No siempre la gente que dicen que va a robar, roba.
Hace cuatro años que usted no colabora dentro de algún gobierno ¿De cuántas ciudades la han buscado para que los asesores en esta materia?
En cuatro años fuera del gobierno he hablado con más de 20 alcaldes, ninguno ha puesto en marcha estos sistemas porque piensan que es una cosa muy sencilla y barata. Pero les hago ver que uno de los principales problemas en todo el mundo es la movilidad y esta es una solución.
¿La bici pública es para todas las ciudades?
No es para todas las ciudades, deben contar con ciertas características como zonas de uso mixto de suelo, deben ser ciudades planas, con buen clima o donde las calles no estén empedradas.
La cumbre del Grupo de Liderazgo Climático de Ciudades (C40) inició con la presentación de un estudio elaborado junto con el laboratorio especializado en diabetes Novo Nordisk en el que revelan entre otras cosas que 84% de los usuarios de EcoBici mejoraron su calidad de vida, que gracias al sistema se dejaron de emitir mil 200 toneladas de gases efecto invernadero, la ciudad tuvo un beneficio económico de 65 millones de dólares y que la bici pública ayudó a evitar 10 muertes prematuras al año ¿Estos resultados se parecen a los que usted perseguía?
Es muy interesante que se haya hecho una evaluación más allá de los aportes a la movilidad que ha tenido el sistema, que se muestre que ha tenido beneficios sociales, de salud pública y combate a calentamiento global. Para mí esto significa que es un sistema que tiene que reproducirse y mi única preocupación es que si ha servido mucho, por qué en los últimos años el sistema se ha expandido muy lentamente. Con este análisis se ratifica o se confirma la pertinencia de su urgente ampliación. Otra cosa que te puedo decir es que no es un programa de combate al calentamiento global, las reducciones son mínimas (mil 200 toneladas de gases de efecto invernadero), no es una reducción que realmente aporte, pero si este sistema crece tendrá un peso específico en la reducción de gases de efecto… hoy es algo simbólico y marca el camino que debemos seguir.
¿En sus cálculos estaban que EcoBici tuviera estos resultados?
Nuestro objetivo fue que en la primera etapa del programa íbamos a tener 24 mil usuarios, el primer año lo cerramos con 27 mil. El sistema de bici pública no tiene pilotos, no puedes hacer pruebitas… la verdad es que estos objetivos sociales, de salud y de combate al calentamiento global no estaban contemplados, pero sí sabíamos que iban a tener un beneficio.
Contexto
En febrero de 2016 Ecobici cumplió seis años. Contaba entonces con 197 mil usuarios, 400 bici estaciones, seis mil 500 bicicletas –cuatro mil entre 2010 y 2012 y dos mil 500 en los últimos tres años– y más de 32 millones de viajes.
En noviembre pasado Martha Delgado viajó a Argentina donde la Cámara de Senadores reconoció su labor otorgándole la distinción “Gobernador Enrique Tomás Cresto, Líderes para el Desarrollo Regional” por sus aportes en las políticas de medio ambiente.