Actualmente, la red de cámaras del Subte está integrada por 800 dispositivos y a fin de año sumarán 1.500.
Ubicado en Chacarita y operado por un equipo de civiles que trabajan para la Policía de la Ciudad, el Gobierno de Buenos Aires (Argentina) puso en marcha el segundo Centro de Monitoreo del Subte, el cual hace parte de la ejecución del Plan Integral de Seguridad Pública que lleva adelante el Gobierno capitalino.
El nuevo espacio se convierte así en la oportunidad para garantizar la normal operación del sistema de transporte, ya que los funcionarios visualizan todo lo que sucede en la red de subterráneos a través de cámaras, en forma ininterrumpida, para detectar y prevenir delitos, contravenciones y faltas.
Santiago Nicuesa, inspector Principal del Centro de Monitoreo de Subterráneos, destacó que “siendo el subte un servicio que utilizan a diario millones de usuarios, vimos la importancia de prevenir los delitos que pudieran suceder bajo tierra, así como lo hacemos en la calle”.
Además, destacó que este nuevo Centro de Monitoreo se suma al que ya funciona en Independencia en la combinación de las líneas C y E, y que permite visualizar en forma preventiva la totalidad de las cámaras de la red.
El nuevo espacio, además, operará como un centro de procesamiento de datos, junto con otro que se está construyendo en Polvorín, en donde se acopiarán las imágenes de todas las líneas. También, cuenta con 12 puestos de monitoreo y tres de supervisión a cargo de operadores especialmente capacitados, que están distribuidos en tres turnos.
En una primera etapa, se podrán monitorear los dispositivos instalados en las líneas B, C y D. Más adelante, se completará la visualización de las líneas A, E, H y Premetro. A medida que el servicio se extienda al resto de las líneas, se incorporará más personal para cubrir la demanda.
De otro lado, el Gobierno bonaerense confirmó que todas las estaciones de la red tendrán entre 1 y 4 pantallas por estación a través de las cuales se podrá ver las imágenes de las cámaras de seguridad. En total, serían unos 163 televisores (44 en la línea A, 30 en la B, 16 en la C, que ya están colocadas, 33 en la D, 16 en la E y 24 en la H). La medida contribuye a reforzar la percepción de seguridad porque los usuarios pueden ver que se los está filmando.