Más allá de una atención detallada, los visitadores médicos dan entrenamiento a los cuidadores de los pacientes para que estén preparados en temas de primeros auxilios.
Con la llegada de 105 nuevos profesionales de la salud, la Prefeitura de Belo Horizonte amplió las frecuencias y regularidad en el servicio domiciliario que hoy atiende a unos diez mil pacientes y que pasará a atender a más de 15 mil personas al año.
Por medio del servicio, reciben asistencia en salud en el domicilio pacientes que demandan cuidados de complejidad intermedia, es decir, que no necesitan de internación hospitalaria pero sí cuidados especiales.
Para los pacientes, el hecho de tener la disponibilidad de atención en la vivienda, implica la reducción de los riesgos de infecciones y complicaciones hospitalarias. Además, el servicio también contribuye a la reducción de internaciones hospitalarias y consecuentemente a la demanda en la Central de Internación (CINT) de Belo Horizonte.
Los equipos médicos, que de acuerdo con las necesidades de los pacientes están integrados por profesionales como médicos, enfermeros, asistentes sociales, técnicos de enfermería, fisioterapeutas, fonoaudiólogos, nutricionistas, psicólogos y terapeutas ocupacionales, ponen a disposición medicamentos, exámenes y llevan a cabo procesos de curación, aunque el servicio no es propiamente una internación domiciliaria.
Igualmente, más allá de la atención detallada, los visitadores médicos dan entrenamiento a los cuidadores de los pacientes, esto con el propósito de que estén preparados para atenciones de urgencia, que prolonguen la llegada de profesionales en casos de extrema necesidad.
Como anexo al aumento en la atención domiciliaria, la Secretaría Municipal de Salud de Belo Horizonte adquirió 3.500 glicosímetros, aparatos que tienen la función de medir la glucosa en el torrente sanguíneo y por lo tanto, auxilian en el control de la diabetes, una de las enfermedades que más requiere de atención en los servicios domiciliarios.