La biodiversidad es fundamental para la alimentación: no se trata sólo de los animales y plantas que vemos en los documentales de la naturaleza, sino que es un aspecto clave para nuestra vida cotidiana.
Foto de Tim Mossholder en pexels
América Latina y el Caribe es una de las principales productoras de alimentos del mundo, gracias a su enorme riqueza de recursos naturales y a su biodiversidad; mantenerla es fundamental para la seguridad alimentaria de todos y todas.
La biodiversidad subyace a todo el sistema alimentario y a la producción de alimentos: así lo demuestra el estudio Biodiversidad para la Alimentación y la Agricultura en el Mundo de la FAO, en el cual participaron más de 90 países, incluyendo.
El informe destaca algunas buenas noticias para la región, de la cual participaron 24 países:
- 77% de las comunidades que viven cerca de los bosques, colectan o consumen productos provenientes de ellos incluyendo plantas, animales silvestres e insectos, claves para su alimentación.
- La mitad de los países están adoptando buenas prácticas que contribuyen a la buena gestión de la biodiversidad, como la agroecología, la agricultura climáticamente inteligente, la agroforestería y los sistemas agrosilvopastoriles
- Al menos la mitad de los países están implementado prácticas de restauración de ecosistemas.
- Los países cuentan con normativas, leyes y estrategias para la conservación de la biodiversidad, e iniciativas regionales para implementar políticas agroambientales.
Biodiversidad y cambio climático
La biodiversidad también es fundamental para enfrentar las nuevas condiciones ambientales generadas por el cambio climático, ya que necesitamos especies de plantas y animales capaces de adaptarse a un clima cambiante.
Contar con una gran variedad de vida a nivel genético, con especies saludables que se desarrollan en ecosistemas ricos e interconectados es clave para poder garantizar la producción de alimentos y la seguridad alimentaria del mundo.
5 contribuciones fundamentales de la biodiversidad para la producción de alimentos
(1) Provee servicios ecosistémicos: suelos sanos, agua limpia, polinizadores, absorción de carbono, ciclos de nitrógeno y aire limpio todos éstos esenciales para una producción agrícola que no requiere de insumos químicos lo que produce alimentos mas sanos, menos contaminación de aguas, diversidad de productos naturales y nutritivos.
(2) Fomenta la resiliencia: la diversidad de ecosistemas, diversidad de productos alimenticios y sus variedades son fundamentales para adaptarnos a diferentes contextos sociales, económicos o ambientales. Colecta de alimentos provenientes de bosques (frutos, hongos, carne silvestre) ofrecen una variedad nutritiva para las comunidades dependientes de los bosques, y también pueden generar otro tipo de insumos que contribuyen al bienestar de las comunidades (forraje, material de construcción, leña) como parte de los sistemas de adaptación y uso de la biodiversidad o en respuesta a shocks, esto en el ámbito rural. La disponibilidad de alimentos naturales en centros urbanos permite luchar contra la obesidad y el consumo de alimentos ultra procesados.
(3) Permite una producción eficiente y diversa: la diversificación de la producción con diferentes prácticas (acuicultura, pesca, agrícola, pecuaria, silvicultura) genera un ciclo de eficiencia en producción y conservación, garantizando la disponibilidad de alimentos sanos y nutritivos en diferentes periodos del año, y facilita los servicios ecosistémicos mencionados arriba.
(4) Mejora las condiciones de vida: facilitando medicinas, semillas, fertilizantes, control de plagas y enfermedades, y también generación de ingresos provenientes de venta de maderas, flores, frutos, peces, algas que contribuyen a la economía rural.
(5) Permite producir alimentos sanos y nutritivos: Disponibilidad de un amplio rango de producción de alimentos nutritivos durante todo el año, fundamental para poblaciones rurales, indígenas, extractivistas dependientes directos de la biodiversidad, disponibilidad de productos en centros urbanos, y servicos ambientales.
Con información de FAO para América Latina y el Caribe