Sólo en 1919 la temperatura de la ciudad estuvo cerca de llegar de nuevo a más de 37 grados como ocurrió en 1915.
Más de 100 años tuvieron que pasar para que en Santiago de Chile se registrara una temperatura superior a los 37 grados centígrados, hecho que pasó esta semana cuando en la capital chilena los termómetros se dispararon hasta los 37,3°C.
De acuerdo con los reportes históricos de la Dirección Meteorológica de Chile, este nivel de calor en la capital no se reportaba desde 1915 cuando el calor alcanzó a marcar 37,2 grados, algo similar a lo que se reportó, sin superar a lo anterior ni a lo actual, en 1919 con 36,3 grados.
Sin embargo, este nivel de temperaturas reportado este jueves parece no integrar un componente que pueda ser determinado como una ola de calor; en cambio, los meteorólogos esperan que para hoy la temperatura no supere los 31 grados.
Además, el dato arrojado durante este diciembre es el más alto en las primaveras de los últimos 60 años, convirtiéndose en un componente más del calentamiento que vive el planeta durante este año, que está marcando una tendencia mundial por los altos niveles de calor.
Este grado alto de exposición al calor, genera otras problemáticas sociales y de salud en las personas. Por un lado, los incendios forestales comienzan a consumir hectáreas interminables de bosques y ponen en peligro las periferias urbanas. De otra parte, las personas comienzan a experimentar enfermedades cutáneas producto de las exposiciones a la radiación ultravioleta.
