En Buenos Aires, los supermercados encabezan el ranking de las solicitudes de inspección que realizan los vecinos con un 28% del total.
Desde ahora, la aplicación móvil BA 147, de la ciudad de Buenos Aires, contará con un renovado sistema que incluye fiscalizaciones comerciales que permite a los porteños realizar reportes por incumplimientos a sus derechos y solicitar una inspección.
Por medio de este recurso, los habitantes de la capital argentina podrán denunciar situaciones como la falta de precio en productos, el cobro en la caja de un precio superior al exhibido, cuando se detecta una publicidad engañosa o se quiere cobrar por una recarga virtual de la tarjeta SUBE o el celular, entre otros.
De acuerdo con Facundo Carrillo, subsecretario de Demanda Ciudadana, “ahora los consumidores pueden reportar en tiempo real cualquier abuso comercial y subir las fotos que grafiquen esa falta con su celular”. Además, destacó que el “equipo de Lealtad Comercial envía una inspección y responde a cada solicitud en forma directa y a través del mail que nos deja el consumidor”.
A través de este mecanismo instalado en los dispositivos móviles, los usuarios comerciales de Buenos Aires podrán fotografiar el precio exhibido en el producto y el ticket emitido por el comercio, generando de esta manera una prueba documental de la falta cuando el local haya cobrado un precio superior.
La aplicación, puede ser descargada directamente a los equipos celulares de manera gratuita desde las tiendas Play Store y Apple Store, y comenzar a generar esta especie de veeduría ciudadana que propende por mejores condiciones para los compradores y más vigilancia ante los abusos comerciales.
En Buenos Aires, los supermercados encabezan el ranking de las solicitudes de inspección que realizan los vecinos con un 28% del total. De acuerdo con las autoridades comerciales, la principal problemática reportada es la diferencia entre el precio exhibido en los mostradores y el cobrado en caja.
A esta queja, le siguen el incumplimiento de las promociones, como por ejemplo las que hacen referencia a 2×1 o descuentos con cupones y la falta de exhibición de precios. A su vez, en los autoservicios la preocupación está dada por la venta de productos vencidos, la imposición de un monto mínimo para pagar con tarjeta, el redondeo a favor del comercio y el fraccionado de productos que no tienen información alguna de marca y contenido.
