Desde hace más de 40 años el Placemaking comenzó a generarse como una metodología para crear lugares con las comunidades, involucrando a todas las personas en el proceso de diseño y creación de sus lugares más significativos.
Esta idea incentivó a personas de todo el mundo a reunirse y hablar sobre el poder de esta metodología y su impacto para transformar la forma en que se vive y aprovecha el espacio público.
Un día como hoy en 2013, en México, nació Lugares Públicos: una asociación encargada de recuperar espacios bajo una óptica más humana y cercana a las necesidades de las comunidades, y apoyada por Project for Public Spaces.
En 2016, Guillermo Bernal, Director Ejecutivo de Fundación Placemaking México, asistió a una ponencia en Vancouver sobre la metodología Placemaking con líderes globales en el tema. En aquel encuentro, afuera de un hotel, mientras se realizaba una actividad para crear un lugar, de entre cientos de líderes, se encontraron quince personas que pertenecían a América Latina.
En ese momento, en una plática casual, un lugar hizo posible que se comenzara a formar la red Placemaking Latinoamérica.
El primer encuentro se realizó en 2017 en Valparaíso Chile, el segundo se conformó en México, el tercero tuvo lugar en Perú, y en 2020 el anfitrión fue Argentina con “Lugares comunes”.
Para ese entonces, Lugares Públicos ya había recorrido un largo camino con diversos proyectos utilizando la metodología Placemaking.
Es en 2019 cuando se conforma Fundación Placemaking México gracias a una red en todo el país que ha hecho posible recuperar espacios desde la frontera con Estados Unidos hasta la península de Yucatán en tiempo récord.
Estas alianzas nos recuerdan los cambios que los lugares públicos pueden implicar en una comunidad. El Placemaking en México no solo ha hecho posible que los habitantes se relacionen con los espacios en los que viven, sino que, incluso, vean nacer a artistas como Alenka, en Tijuana, que pintó su primer mural en Tijuana.
En esa intervención ella venció el miedo y los nervios y plasmó para su comunidad la importancia de ser mujer en Tijuana y los lazos con sus vecinas en una pared que usualmente todas miran al tomar el transporte público.
Estas intervenciones también han invitado a pequeños como Byron a involucrarse en temas de seguridad vial en su colonia. Fue él quien en esta intervención tomó la iniciativa para dirigir y motivar a sus vecinos y vecinas y trazar cruces seguros en los alrededores de su parque en Colima.
Recuperar espacios con y para la comunidad ha reforzado el sentimiento de pertenencia de comunidades como La Joya, al limpiar su parque, darle mantenimiento y decorar sus contenedores. Han sido 20 parques rehabilitados por y para las comunidades de México con la metodología Placemaking desde que inició la pandemia y 50 proyectos más que buscan incentivar las actividades saludables al aire libre, como el deporte y la actividad física.
Son estos algunos ejemplos del alcance que, gracias a nuestros aliados, donantes y comunidades, se puede lograr al mirar, diseñar y crear distintos lugares públicos.
Agradecemos a todas las personas y organizaciones que han sido parte de este camino. Por los primeros 8 años y por los que vienen, sigamos trabajando para convertir espacios en lugares.
