Bogotá supera los 50 microgramos por metro cúbico de material particulado PM10 en el aire, según la OMS.
Más de 750 mil neumáticos desechados al año, la mayoría de los cuales terminan en rellenos sanitarios de Bogotá, mientras los otros son quemados, comenzarán a ser reciclados por un grupo de estudiantes de la Universidad Nacional de Colombia sede Bogotá, con el fin de a partir de su polvo sobrante fabricar placas de aislante térmico para utilizarlas en el sector de la construcción.
Este procedimiento, consiste en una intervención luego de que las llantas son trituradas y pulverizadas. En el proceso seguido, ese resultante de los neumáticos pasará por una serie de procesos y serán tratadas con un aglomerante especial hasta generar las ecoplacas.
La idea, surgió luego de que este grupo de estudiantes de ingeniería descubriera que “las placas térmicas hechas con polvo de caucho tienen baja conductividad térmica y son muy buenos aislantes acústicos”.
El proyecto, con el que se aliviará en parte uno de los aspectos más contaminantes en la capital colombiana, comenzará a ser aplicado en la localidad de Suba al noroccidente de Bogotá, por ser una zona que alcanza concentraciones promedio de 55 microgramos por metro cúbico de material particulado PM10, de acuerdo con datos revelados por la Red de Monitoreo de Calidad del Aire.
Según los estudiantes integrantes del proyecto, esta intervención colaboraría para que se reduzcan las concentraciones de PM10 en un 10% en la localidad de Suba durante los próximos 18 meses, aportando un gran desarrollo a una problemática que según varios estudios logra aumentar la mortalidad en un 3%.
