Las casas para ciclistas: una red en expansión para viajeros que recorren Latinoamérica

Las casas para ciclistas: una red en expansión para viajeros que recorren Latinoamérica

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LA Network
28 abril, 2019 - Ética Ciudadana

Con la creciente práctica de recorrer América en bicicleta, también aumenta la red de lugares que, de diferentes maneras, ofrecen desde hospedaje hasta oficinas de trabajo a los viajeros y nómadas de las dos ruedas.

La ‘Casa Bici Pasto’ es uno de los lugares que acoge ciclistas viajeros de paso por Colombia y que ha diversificado sus líneas de negocio para hacerse sostenible. Foto: Casa Bici Pasto.

Sus fotos en las redes sociales nos causan envidia, por qué negarlo. Una bici, unos morrales, la libertad y detrás de ellos o ellas los más espectaculares paisajes que se puedan soñar entre Canadá y Ushuaia en Argentina.

Desde hace varias décadas se ha hecho más visible la atracción que cruzar el continente de un extremo al otro está cobrando. Aunque en un primer momento se pudiese considerar una aventura en la que todo queda al azar de cada trayecto, también desde hace tiempo se practica que, a lo largo del camino, los ciclistas viajeros han hecho comunidad y de ella han surgido casas que los acogen en las ciudades o poblaciones a las que arriban en distintos países. Se trata de las casas para ciclistas o ‘Casas Bici’

El colombiano John Timaná, de la ciudad sureña de Pasto (Nariño), cerca de la frontera con Ecuador, explica que “las casas ciclistas son espacios, hogares o casas de familias que reciben cicloviajeros que están de trayecto, de paso y buscan una ayuda en hospedaje, alimentación, consejo, información, en mitad de las ciudades latinoamericanas durante sus viajes entre el norte y el sur o incluso en sentido sur- norte”.

Timaná considera que esta dinámica se viene dando desde mediados de los años 80 con casas para ciclistas como la de Trujillo (Perú), abierta por Luis Alberto Ramírez D´Angelo, en un proceso en el que surgen o se cierran casas, pero que no deja de ser permanente y que al igual que los cambios en las sociedades, ellas también van cambiando con el tiempo.

“Ellas están ubicadas a lo largo de la carretera Panamericana e incluso hay varias plataformas digitales como Warmshowers, Couchsurfing o iOverlander que integran la oferta de estas casas”, agrega Timaná.

Las casas para ciclistas: una red en expansión para viajeros que recorren Latinoamérica
Aquí una imagen de la Casa Bici de Charito en El Chaltén, una villa del Parque Nacional Los Glaciares, en la provincia argentina de Santa Cruz. Foto: Pedaleando Alma.

En Colombia, explica, existen cerca de 30 casas de este tipo ubicadas en ciudades como Medellín, Barranquilla, Bogotá, Bucaramanga, Manizales y claro, Pasto, donde los cicloviajeros pueden hallar refugio.

Viajar en bicicleta por América tiene grandes ventajas principalmente económicas y claro como una experiencia inigualable de vida, lo que ha hecho crecer, según Timaná “exponencialmente” el número de ciudadanos europeos, norteamericanos y latinoamericanos que quieren poner a rodar sus vidas.

Lea: Felipe Besné: las aventuras de un cicloviajero mexicano

Si bien el perfil predominante son hombres solos, Timaná considera hoy una distribución de 70 % hombres y 30 % mujeres. Pero esa caracterización viene cambiando y ya incluso se están registrando casos de madres con sus hijos jóvenes y familias enteras. Además, está cambiando la dinámica en la que los cicloviajeros eran personas que se daban unos espacios de tiempo amplios en sus vidas y sus trabajos para realizar los viajes, ya que también viajan personas con un trabajo activo.

‘Casas Bici’, nuevas maneras, nuevas tendencias

Guadua Coworking Space es el nombre de la ‘Casa Bici Pasto’ que lidera Timaná en Pasto y que ha estado evolucionando a la par del cambio de los perfiles, usos y tendencias con que llegan los viajeros.

En ese sentido, señala, que ya muchos viajeros trabajan durante sus viajes (publicistas, fotógrafos, financieros, etc.) y por ello se ha hecho necesario que las casas, además de ofrecer los servicios más tradicionales y básicos como una cama, alimentos, una ducha e información; ahora se sumen espacios de coworking, por ejemplo

“Guadua Coworking es un espacio de oficinas en alquiler, en arriendo que tiene incluso taller, zona verde, una ágora -teatro al aire libre- y una zona para parrilladas, que además se rentan para diferentes empresas de nuestra ciudad”, explica Timaná.

Las casas para ciclistas: una red en expansión para viajeros que recorren Latinoamérica
John Timaná, quien participó en el Foro Mundial de la Bici en Quito con su ponencia sobre la Red de Casas Ciclistas en Latinoamérica.

En pocas palabras, las casas para ciclistas están tomando impulso hacia iniciativas que buscan trascender del modelo asistencial, por ejemplo, a organizaciones que, como en el caso de ‘Casa Bici Pasto’, generen recursos a través de líneas de negocio que garanticen la sostenibilidad de las casas y su oferta.

“Trabajamos en tres líneas: fomentado el uso de la bici a través de talleres pedagógicos de mecánica que se ofrecen a entidades públicas o privadas que pagan los talleres”, detalla Timaná.

La línea dos se trata de los servicios de ‘Biciturismo’ en la que acogen a los viajeros, ellos pagan un importe y así subvencionan los gastos básicos del lugar.

Y la tercera línea es la más vocacional en la que Timaná y los participantes de sus iniciativas trabajan con las organizaciones ciudadanas para el fomento del uso de la bicicleta como transporte urbano.

Pero aún hay más. Todo este esquema que nace como soporte para los cicloviajeros por el continente, está creciendo hasta empezar a dar los primeros pasos hacia una Red Latinoamericana de ‘Casas Bici’ que en este momento tiene integradas a 115 en toda la región.

Timaná explica que cada vez hallan más casas, sin embargo, muchas de ellas no hacen uso de las TICs por lo que no se han integrado a la red. Pero cada vez son más las que se descubren, tienen la estructura y la voluntad para integrarse a la Red en proceso de conformación y que, según el colombiano, tiene su clave en el trabajo colaborativo, para que cada vez más bicicletas rueden libremente por las carreteras del continente.

La experiencia de viajar en bicicleta es inigualable, por lo que crece “exponencialmente” el número de ciudadanos europeos, norteamericanos y latinoamericanos que quieren poner a rodar sus vidas.