El 76,8 % de la población de América Latina pertenece a estratos de ingresos bajos o medios-bajos, subraya la CEPAL, y las personas que viven en estratos de ingresos altos pasaron del 2,2 % al 3,0 %.
La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), aseguró en un nuevo informe que superar la pobreza en la región va más allá del crecimiento económico, y debe incluir políticas redistributivas y fiscales que promuevan el verdadero bienestar entre los ciudadanos en áreas como la protección social, la salud y la educación.
“Por casi una década, la CEPAL ha posicionado a la igualdad como fundamento del desarrollo. Hoy constatamos nuevamente la urgencia de avanzar en la construcción de Estados de Bienestar, basados en derechos y en la igualdad, que otorguen a sus ciudadanos y ciudadanas acceso a sistemas integrales y universales de protección social y a bienes públicos esenciales, como salud y educación de calidad, vivienda y transporte”, aseguró Alicia Bárcena, Secretaria Ejecutiva del organismo regional.
Entre los datos destacados en el informe se encuentra el crecimiento de los estratos de ingresos medios entre 2002 y 2017, aunque siguen experimentando diversas carencias y vulnerabilidades, tanto en relación con sus ingresos como en el ejercicio de sus derechos, alerta la Comisión.
A su vez, según el estudio, para 2018 un 30,1 % de la población de la región se encontraba bajo la línea de pobreza en 2018, mientras que un 10,7 % vivía en situación de pobreza extrema, tasas que aumentarían este año a 30,8 % y 11,5 %, respectivamente, según las proyecciones de la CEPAL.
El estudio de la CEPAL también señala que la desigualdad en la distribución del ingreso -expresada en el índice de Gini con base en las encuestas de hogares- ha continuado su tendencia a la baja (en promedio cayó de 0,538 en 2002 a 0,465 en 2018 en 15 países), pero a un ritmo menor que en años recientes: mientras entre 2002 y 2014 se redujo 1,0 % anual, entre 2014 y 2018 la caída fue de 0,6 % por año.