La ACNUR se hace presente para brindar asistencia humanitaria, psicosocial y asesoría legal a los solicitantes de asilo, así como para atender situaciones específicas de la población vulnerable.
Con el cálculo del ingreso masivo de hondureños este fin de semana a territorio mexicano, organismos nacionales especializados y la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados – ACNUR, se preparan en conjunto para recibirlos luego de una petición formal de las autoridades del país para que el personal de la Agencia de la ONU acompañe la tarea de acoger a los migrantes, revisar las solicitudes de asilo que se pudieran presentar y otorgar ayuda de emergencia.
“Reiteramos y subrayamos que cualquier persona de ese grupo que esté huyendo de la persecución y la violencia debe tener acceso a entrar a los territorios, se le debe permitir que ejerza su derecho fundamental de pedir asilo y debe tener acceso al debido proceso para solicitar la condición de refugiado. Esto está en la legislación nacional de todos los países implicados y es importante que se cumpla la ley”, apuntó este viernes Charlie Yaxley, portavoz de ACNUR.
Desde el inicio de la caravana, el presidente estadounidense, Donald Trump, ha hecho declaraciones en las que ha responsabilizado a México de evitar que el contingente cruce a Estados Unidos, amenazando con militarizar y cerrar la frontera si así no fuera. Frente a este discurso, el portavoz de ACNUR en Ginebra recordó que todos los países deben apegarse a las leyes y respetar los derechos de migrantes.
Por otra parte, el relator especial de la ONU sobre los derechos humanos de los migrantes, Felipe González Morales, destacó que cuando se producen movimientos masivos de migrantes hay que entender las causas que los provocan y se deben tomar medidas adecuadas y proporcionales para el caso.
Una caravana de cerca de tres mil personas que huyen de la violencia y la pobreza, en su gran mayoría, hondureños llegó a la frontera de Guatemala con México con la intención de cruzar este país y dirigirse a Estados Unidos. El Gobierno de México ha pedido ayuda a la ONU para atender a estos migrantes y la Agencia para los Refugiados (ACNUR) refuerza su presencia para asistir.