Un total de 52 entidades oficiales reportaron sus cifras para la construcción del informe: hay avances importantes pero…
Que el desempleo haya bajado medio punto porcentual y que la pobreza extrema muestre también una reducción, al pasar del 17.7% en el 2015 al 16.4% en el 2016; son algunos de los indicadores que investigadores del programa Pereira Cómo Vamos consideran para calificar los resultados del Informe de Calidad de Vida 2017 “más buenos que malos”.
Así lo expresó a LA Network, Óscar Andrés Jiménez, miembro del comité técnico del programa y actualmente Coordinador encargado de Pereira Cómo Vamos.
“Es nuestro informe anual con datos oficiales objetivos, no es el de percepción sino el de datos duros que en general son resultados más buenos que malos. En primer lugar la dimensión económica va bien”, indicó Jiménez, también Coordinador de Investigación socio-económica de la Cámara de Comercio de Pereira.
De hecho, el Diario del Otún, principal medio escrito de la capital de Risaralda, en su columna editorial tras la publicación del informe indicó que; “Aunque con algunas cifras negativas, en general los indicadores del informe de calidad de vida de los pereiranos preparado por el colectivo Pereira Cómo Vamos, es bueno y refleja avances importantes en materia económica”.
Y es que a las dos primeras cifras ya mencionadas se agrega que la ‘Perla del Otún’ tuvo durante 2016 un crecimiento económico superior al promedio nacional: mientras el país creció ‘tan solo’ 2%, Pereira alcanzó un destacado 4,5%, dato al que se suma que la ocupación laboral superó una cifra que por mucho tiempo se pensaba insuperable como las 300.000 personas ocupadas con un 51,4%.
Pese a ello, el Informe destaca que de los 122.664 niños (entre 5 y 17 años) que viven en el área metropolitana integrada por Pereira, Dosquebradas y La Virginia, se registra la compleja cifra de 6,583 niños trabajando “(…) lo que deja en evidencia situaciones de abandono de las actividades académicas y otras situaciones que pueden impedir su libre desarrollo a futuro.
En la dimensión de la educación es, precisamente, donde Jiménez llama la atención. “Hay resultados mixtos en la educación, en donde en la básica vemos con preocupación que hay disminución sistemática de la cobertura. En la superior un aumento en matrículas, esto más resultado de una gestión propia que de las secretarías de Educación pues estas instituciones no tienen competencia en ellas, es un esfuerzo privado”.
“El número de estudiantes matriculados en el total de la básica y preescolar se ha reducido en 12.493 entre el año 2012 y el 2016”, indicó el reporte.
La cifra va de 93.049 estudiantes matriculados (2012) en instituciones oficiales, a 79.074 durante el año anterior. Para Jiménez, esta tendencia tiene que ver tanto con la recomposición demográfica y la presencia de algunos factores de riesgo para la deserción, como porque “algunos jóvenes se nos están yendo al mercado laboral, no terminan la media o se están yendo a programas técnicos”, explicó el experto quien recalcó que hay que estudiar más este aspecto no muy investigado.
Además, el indicador de deserción escolar global se mantiene en 5,5% para 2016 y el 7% de los estudiantes de la básica secundaria desertaron en el mismo periodo.
Pero si los indicadores económicos hacen pensar que la ciudad va por un camino de avance y los resultados en educación son mixtos, en materia de Seguridad Ciudadana no hay avances significativos según el documento.
La tasa de homicidios por cada 100.000 habitantes se ubicó durante el período estudiado (2016) en 31 personas muertas de manera violenta, un indicador superior al del promedio nacional ubicado en 24,4; aunque disminuyendo respecto al 2015 en el que el la tasa fue de 33/100.000 habitantes. Las muertes pasaron de 152 en 2015 a 148 en el año inmediatamente anterior.
“En seguridad los homicidios permanecen en líneas generales estables, no bajan significativamente pero hay un aumento muy importante en hurtos a residencias, establecimientos y personas. En general se ha deteriorado la seguridad ciudadana”, reportó el Coordinador encargado.
Como es ya recurrente en este tipo de cifras en el país y Latinoamérica, “el 84% de los homicidios ocurridos en la ciudad de Pereira, corresponden al rango de edades entre 18 y 49 años”, es decir las edades más productivas de la población afectando la sostenibilidad.
En materia de movilidad sostenible, el informe muestra que aunque mejoró el número de pasajeros en el sistema masivo, la motorización (especialmente motos), no se detiene.
El uso de Megabús, el sistema de buses de tránsito rápido de la ciudad, aumentó casi en un tres por ciento al pasar del 22,6% al 25,5%, cifra positiva en términos de menos emisiones contaminantes, pero a la que se le opone el aumento en uso de motos que creció un 6.3%, pasando de 14,9% en 2015 a 21,2% en 2016. El otro indicador positivo es el aumento en el número de caminantes o peatones que pasó del 9 al 12%.
Aunque la cifra muestra una relativa contradicción, el uso del transporte público colectivo, el bus tradicional, disminuyó en 6,2% pasando de un 31% en 2015 al 24,8% el año inmediatamente anterior.
Uno de los aspectos más relevantes, pero como reconoció el Coordinador del Programa Cómo Vamos, más olvidados fue el de hábitat. “Una dimensión en general olvidada que es hábitat urbano que no avanza ni retrocede que es el espacio público, vivienda, medio ambiente y todo esto vemos que la ciudad tiene las mismas cifras de hace algunos años”.
Por ejemplo, el consumo de agua por habitante que, según indica la Organización Mundial de la Salud, debe ser de 100 litros/habitante/día; en la capital de Risaralda está en 211,5 litros.
En materia de reciclaje de residuos sólidos, la ciudad solo está reciclando el 6% de un potencial del 38,6% que podría ser reutilizado.
Óscar Andrés Jiménez, coordinador encargado del Programa Pereira Cómo Vamos, concluyó que esperan que la ciudad mantenga durante el presente período un ritmo de ingresos importantes y se “incorpore la mayor proporción de habitantes a la clase media y esperaríamos que mejoren algunos indicadores de medio ambiente para desarrollar los programas de la administración actual como la intervención de algunos espacios públicos”.