La capital ecuatoriana se consolida como una de las ciudades con mayores metros cuadrados de espacio público por habitante en la región andina.
El alcalde de Quito, Mauricio Rodas, aseguró que para finales del mes de abril de este año se espera estén terminadas todas las obras previstas para convertir a la ex pista del aeropuerto Mariscal Sucre, en uno de los parques más grandes e inclusivos del país.
Se trata de las obras que le darán vida al Parque Bicentenario, un proyecto en el que hasta el momento se han invertido 5.3 millones de dólares, sin tomar en cuenta la inversión de 15 millones de Quiport para la construcción del Centro de Convenciones Bicentenario, el Bulevar de la Amazonas que costó 2.5 millones, la Plaza de la Bienvenida 1.2 millones y el costo del movimiento de tierras.
En este nuevo espacio en construcción, el alcalde Rodas participó, junto a cientos de ciudadanos voluntarios de la Corporación Favorita, en la siembra de 330 árboles nativos y en la reimplantación de una palmera de nueve metros, que tiene más de 20 años.
El bulevar Amazonas, que fue el primer gran proyecto de la adecuación integral del Parque Bicentenario, con una extensión de 700 metros de largo, por 20 metros de ancho en el extremo suroeste, cuenta con zonas infantiles, ciclovía, piletas con iluminación, esculturas y murales.
Mientras tanto, se trabaja en la construcción de la “Plaza de la Bienvenida” que conectará en una sola plataforma la vía que fue el acceso al arribo nacional del antiguo aeropuerto, la avenida Amazonas y el Centro de Convenciones.
Quito se mantiene como la ciudad del Ecuador con más espacios verdes por habitante. El Índice Urbano Verde (IVU) es de 21,6 metros cuadrados por habitante, tomando en cuenta que la Organización Mundial de la Salud OMS marca como un parámetro internacional 9 metros cuadrados.
