El nuevo prototipo de construcción para conservar el estilo nativo del balcón propone ubicarlo al frente o en la parte de atrás, para que los habitantes mantengan la interacción con los vecinos.
María Fernanda Castellanos, estudiante de Arquitectura de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL) Sede Manizales, propuso revitalizar la arquitectura vernácula de la Isla de San Andrés por medio de un diseño que tenga en cuenta el contexto cultural que se ha venido perdiendo en la isla.
A partir del análisis de las construcciones sanandresanas, Castellanos propone una vivienda en la que se retomen las características culturales del lugar, pero utilizando materiales reciclables como los residuos producidos por habitantes y turistas, que ayuden a mejorar las condiciones ambientales de la Isla.
“Hoy este sistema de vivienda a base de madera ya no es rentable por lo costoso que resulta transportar el material desde el continente y porque la calidad cada vez es menor. Por esta razón, los isleños prefieren construir con cemento y ladrillo, que implica menores costos y mantenimiento, sin importarles la tradición y la exaltación de la cultura a través de sus propias viviendas”, destacó la académica.
En San Andrés, la arquitectura típica de la isla está compuesta por construcciones en madera, material que por sus condiciones se comporta bien frente a las características climáticas y de salinidad del lugar; se usa tanto para estructuras y recubrimientos como para los elementos decorativos, característica principal dentro de este modelo.
La propuesta arquitectónica de la estudiante contempla ampliar el grosor de los muros, lo que permitirá mejorar la condición climática de la vivienda en su interior; se conservará la misma altura de las viviendas típicas con el fin de que se genere un sistema de ventilación cruzada en el lugar, aprovechando también las aberturas de puertas y ventanas que dan hacia los balcones o hacia el exterior de las casas.
Con información de la Agencia de Noticias Universidad Nacional.