Mi historia con la Bici es vieja, tengo una cicatriz en el mentón y un montón de anécdotas de cuando era muchacho y competía. Luego hubo un momento de rompimiento, cuando deje de ser peatón y me aleje de ella.
A uno lo convencen que progresar es tener carro y uno se deja encerrar. Luego vino mi segundo enamoramiento con la bici de cuenta del desarrollo sostenible.
Descubrir que la mayoría de las cosas, se encuentran a distancias manejables en medios alternativos de transporte, y la cantidad de huella de carbono que se deja, al andar por ahí quemando gasolina, me hizo llegar de nuevo al los brazos de mi amada cicla.
Fue en diciembre del 2014 cuando oficialmente me volví ciclista urbano, comencé a abogar por otras formas de moverse y lo que esto implica para las ciudades, y a impactar a las personas de Panamá cuando me veían por ahí. Llevar la bici a todo tipo de reuniones era parte de ese activismo. Sin importar si me reunía con un ministro, o con los directivos de un banco, siempre el tema de por que me movía en la bici terminaba siendo conversación. Así fue que cree mi campaña en redes de #UnCarroMenosPTY para compartir mis aventuras por Ciudad de Panamá. La idea era demostrar que si se podía, nadie hasta ese momento lo estaba haciendo y el solo hecho de que alguien lo hiciera, por lo menos daba el espacio para que otros lo intentasen.
De eso ya 8 años, hoy luego de la pandemia las ciudades le apuestan a la movilidad en bicicleta y yo desde luego…también.
Cada vez estoy mas comprometido con el tema, ahora es parte de mis proyectos en nuestro laboratorio de innovación abierta, y además creo que las personas han comenzado a ver en la bici una verdadera opción de transporte, limpia y saludable.
En un día mundial de la bicicleta, esculque la memoria de mi cell y mi tableta , y encontré algunas fotos de las que he tomado…se las comparto feliz para invitarlos a que me acompañen, que comprueben que es #MejorEnBici y que es muy bueno que haya #UnCarroMenosPTY