Capitán Nube ofrece una experiencia lúdica dirigida a niños entre 7 y 12 años, consta de una aplicación móvil y un juguete que explica conceptos sobre la contaminación emitida por los modos de transporte y sus efectos en la calidad del aire y la salud.
Capitán Nube es un proyecto adelantado por estudiantes de Diseño Industrial de la Universidad Nacional de Colombia (U.N.), quienes evidenciaron que las personas desconocen la relación entre los medios de trasporte y la contaminación del aire.
El estudiante Diego Medina explica que el primer paso fue indagar qué tanto sabía la gente sobre el tema por medio de encuestas y entrevistas. “Evidenciamos que las personas desconocen cuál es el medio de transporte que más contamina. Por ejemplo consideran que el Transmilenio contamina más que un carro particular, sin tener en cuenta la cantidad de pasajeros que transporta cada uno”, detalló.
Por eso propusieron un plan de aprendizaje para niños de entre 7 y 12 años, en el que el personaje principal es el Capitán Nube, una especie de astronauta que va visitando varios planetas salvándolos de las malas prácticas y llega a la Tierra con el objetivo de que los niños la salven de la contaminación.
El plan viene apoyado de una aplicación en la que se relata la historia de este personaje y luego les enseña conceptos teóricos como qué son los modos de transporte, cómo funciona cada uno y cómo evidenciar la contaminación de la ciudad.
La aplicación también incentiva a que los padres acompañen el proceso de sus hijos y les formula una serie de retos que contribuyen al medioambiente, como aumentar el uso de la bicicleta, plantar y proteger árboles, entre otros.
“Con esta herramienta los niños pueden impactar en su familia, luego en su colegio y en su comunidad. Se les explica que con liderazgo y cooperación es posible generar un cambio”, amplía la estudiante Carolina Castro.
Otra de las herramientas fundamentales del proyecto es un juguete pequeño en forma de astronauta que representa al Capitán Nube, del que hasta ahora se tiene un primer prototipo, pero se busca dotarlo con elementos tecnológicos para que el rostro sea una pantalla en la que se representen emociones.
Es decir, si el niño cumple los retos y las actividades que se proponen en la aplicación, el juguete tendrá una emoción alegre, representando el agrado al esfuerzo del menor, pero al momento en que incumpla sus labores estará decaído y triste.
El trabajo continúa y se espera que el juguete del Capitán Nube cuente con conectividad wifi para sincronizarse con los datos de la aplicación, e incluso que exista una conexión simultánea entre el niño, sus padres y el docente, de esta manera se puede analizar qué acciones realiza la comunidad para mejorar la calidad del aire.
“El objetivo es que noten que la contaminación está presente y es algo que puede afectar su salud. Incluso se explica que si la contaminación es elevada, el material articulado, que tiene un tamaño de 2,5 micras, puede causar aneurismas y afectaciones mortales”, detalló el estudiante Medina.
El proyecto está siendo realizado por el equipo Ludó en el marco de la asignatura Observatorio de Movilidad Sostenible y ya fue presentado en el “Encuentro de Observatorios de movilidad urbana en Bogotá y América Latina: experiencias y perspectivas”, organizado por Connective Cities en cooperación con la Secretaría Distrital de Movilidad de Bogotá.
Además se expuso en la Feria de Movilidad y Transporte 2018 como parte de la representación del Observatorio y la U.N.
Agencias de Noticias UN