La Escuela Sustentable es un proyecto piloto que vinculó a diversos actores para promover la construcción de escuelas primarias públicas sustentables en Uruguay. El primer edificio de este tipo fue construido en 2016 en la localidad de Jaureguiberry, y se ha convertido en una herramienta de iniciativas innovadoras y mensajes sobre sostenibilidad que han atraído en solo un año a aproximadamente 30 000 personas del mundo entero.
Construido por voluntarios, apoyados por los sectores privado, público y académico y con una fuerte participación de la comunidad, el edificio está hecho en gran parte con materiales reciclados, utiliza energías renovables, recolecta el agua de lluvia y la reutiliza en su sistema de aguas grises y negras, no necesita calefacción y produce alimentos que los niños y niñas que lo habitan, cuidan y cultivan.
La construcción duró tan solo 45 días y es un modelo de gestión público-privada para un edificio escolar nunca antes visto, con la participación del gobierno, empresas, ONGs, comunidades y personas particulares. Abre la posibilidad de crear y ejecutar contenidos sobre sustentabilidad dentro del programa de educación Primaria, poniendo en el centro al desarrollo humano y medioambiental de la educación del niño.
El proyecto ha recibido el Premio Nacional de Innovación en su país y también el Premio Latinoamérica Verde el año pasado en la ciudad de Guayaquil (Ecuador).