El Boletín Económico Regional de la Costa Caribe del Banco de la República, que incluye a todos los departamentos de la región, fue divulgado la semana pasada y presenta un diagnóstico de los temas económicos del segundo trimestre de 2021. En síntesis, la economía regional creció 19,6% en ese periodo, 0,2% puntos porcentuales menos en comparación con el trimestre anterior. Sin embargo, esta cifra refleja que los departamentos están en la senda de la recuperación pospandemia, además porque todas las variables de este indicador experimentaron un crecimiento. Específicamente, la ocupación hotelera y la venta de vehículos nuevos registraron incrementos significativos a pesar de haber sido de las actividades más afectadas por el COVID-19.
En lo que respecta al sector agrícola, se dieron buenos resultados en los productos que salieron hacia el resto del país, con mayor participación de frutas (mango, papaya, banano) y verduras (mazorca chócolo y ahuyama). En cuanto a Sucre y Córdoba, hubo avances notorios respecto al crecimiento en la comercialización de ganado vacuno teniendo en cuenta que las subastas se han hecho de forma virtual. En relación con el sector industrial, sobresalen Atlántico y Bolívar por sus índices de producción y ventas reales. En el primero se destacan los productos de alimentos y bebidas, químicos, farmacéuticos, caucho y plástico, así como productos metálicos. De manera similar, en Bolívar lo hicieron los químicos, farmacéuticos, caucho y plástico, impulsando en mayor medida las cifras de empleo a diferencia de Atlántico.
El sector de la construcción, al igual que a nivel país, presentó avances considerables en obras residenciales y, en menor medida, en no residenciales. Atlántico (40%) y Bolívar (28%) lideran el ranking en este sector, aunque Sucre cuenta con una participación regional de 5% en cuanto al área aprobada para construcción. Respecto al turismo, se evidencia un crecimiento sostenido iniciado a finales de 2020. San Andrés y Providencia y Cartagena fueron las ciudades con mayor índice de ocupación hotelera, sin embargo, el Golfo de Morrosquillo y Sabana presenta también un repunte significativo que se acerca a los niveles prepandemia.
En cuanto al mercado laboral, se destacan la recuperación en la tasa de ocupación y la tasa global de participación, y la reducción de la tasa de desempleo como consecuencia de la reapertura económica y las estrategias gubernamentales enfocadas hacia la juventud. Todas las ciudades presentan cifras de desempleo superiores a la regional excepto Barranquilla y Cartagena. Respecto a la cifra de informalidad, esta se ubica en un preocupante 60% encabezando la lista las ciudades de Riohacha, Sincelejo y Valledupar. Finalmente, el sector financiero en Sucre, representado por depósitos de ahorro, corriente y CDTs, presentó las menores cifras junto a La Guajira y San Andrés. A pesar de ello, los créditos de consumo y vivienda aumentaron en el departamento. Por estos días salió también el Índice de Competitividad de Ciudades 2021, en la cual se destaca Sincelejo por haber subido dos posiciones respecto al 2020, ubicándose en la casilla 20 entre 32 ciudades. El pilar de salud fue el que más avanzó, específicamente, los indicadores de mortalidad infantil y controles prenatales, así como las coberturas de vacunación y camas de servicios especializados. Mercado laboral y sostenibilidad ambiental fueron los pilares con las puntuaciones más bajas.
Aunque las cifras económicas en general reflejen niveles positivos, hay indicadores que aún se mantienen por encima de la media nacional y muy rezagados de los niveles prepandemia e incluso de lo deseado. Los departamentos de “siempre” (Atlántico y Bolívar) son los que presentan las mejores condiciones, por eso las estrategias deben estar encaminadas hacia el fortalecimiento de los otros departamentos.
Columna publicada originalmente en El Meridiano.
