Otra Ciudad es un colectivo profesional de Chile que recientemente ganó el concurso de intervenciones urbanas de Placemaking Latinoamérica y el Laboratorio de Ciudades del BID, por su propuesta de arte y renovación urbanas.
Cada vez son más los artistas y los colectivos artísticos y culturales en Latinoamérica que se atreven a construir ciudad a través del arte urbano, un modo de expresión que acrecienta la identidad de una región como la nuestra, donde nos preciamos de tener espacios únicos en el mundo como el Museo Abierto de Arte Urbano en Sao Paulo.
Muros de Colombia, Brasil, México y Argentina son la muestra y dan cuenta de cómo algo potente pasa en la región y que el arte urbano se está tomando los espacios para generar verdaderas transformaciones. Ahora, un nuevo estilo de arte urbano está apareciendo de la mano con los arquitectos, y con colores llamativos, se está tomando parques, canchas, plazas, pisos, calles y otros espacios públicos donde las personas pueden ejercer el derecho a la ciudad, espacios donde habita Otra Ciudad.
Otra Ciudad transforma espacios posibles
Otra Ciudad es una oficina-plataforma de trabajo enfocada en la creación de nuevas ideas para el desarrollo del espacio público a través del arte urbano. El equipo es dirigido por el arquitecto Sebastián Cuevas, desarrollador de las Plazas de Bolsillo en Santiago de Chile y ligado al mundo del grafiti. Con el tiempo, los diseños de Otra Ciudad han llegado a espacios públicos en diferentes instancias de su país, e incluso, han logrado trascender las fronteras y llegar a países como Estados Unidos y México.
“Trabajamos en la transformación de espacios públicos degradados: calles, sitios eriazos (abandonados) o multicanchas. El objetivo es activar estos espacios por medio del arte urbano, construyendo nuevos imaginarios en la ciudad”, afirman sus promotores.
Esos imaginarios, que se reflejan en ciudades como Medellín, con Pictopía y el Graffitour; en Buenos Aires, con sus galerías de arte urbano en Coghlan, La Boca, Palermo y Barracas; en Bogotá, con sus monumentales grafitis que adornan las céntricas calles capitalinas e inspiran su recorrido; o el Street Art, en Ciudad de México, Querétaro, Juárez, Puebla, Tijuana y Pachuca, han permitido que Otra Ciudad convoque y participe de intervenciones que dan vida a los espacios “muertos” de las urbes latinoamericanas.
“En Santiago de Chile ejecutamos tres murales de grandes dimensiones, transformando y activando una edificación industrial del Persa Víctor Manuel (edificación de carácter histórico) (http://www.persavictormanuel.cl). También, ganamos un concurso en Miami para una intervención en la zona de Wynwood junto a Street Plans” relatan.
Intervenciones que no solo les han brindado la oportunidad de reconocimiento nacional e internacional por sus ejecutorias en espacios históricos, sino la fortuna de trascender como ganadores de concursos que les permiten dejar huella en zonas urbanas de Latinoamérica antes abandonadas o desprotegidas.
Pintando Otra Ciudad en Latinoamérica
Recientemente, como ganadores del concurso de intervenciones urbanas, los chicos de Otra Ciudad emprendieron labores en Ciudad de México para Placemaking, con un proyecto llamado Multicancha.
“El concurso organizado por Placemaking Latinoamérica y el Laboratorio de Ciudades del BID, tenía como objetivo innovar en la solución de problemáticas del espacio público con intervención de bajo costo y alto impacto. Esto nos permitió desarrollar una intervención en el sector de Tacubaya”, resaltan.
La propuesta Multicancha: nuevos escenarios para actividades deportivas, se trata de una intervención de pintura mural realizada por el artista BascoVazko, cuyo objetivo es potenciar las actividades deportivas que se realizan en la cancha al final de calle cerrada Rufina, en el sector de Tacubaya, permitiéndoles así entender a los integrantes de este colectivo, el potencial que tienen en manos y las oportunidades para las urbes latinas.
“Estas experiencias nos han permitido entender el potencial que existe en Latinoamérica para el desarrollo de nuevas ideas para el espacio público, especialmente utilizando el potencial del arte urbano en la transformación de espacios degradados”.
La intervención, como describen los integrantes de Otra Ciudad, es el resultado del diálogo con los vecinos y boxeadores callejeros, principales usuarios del lugar, donde acordaron hacer una muestra de arte urbano de 250 m2 sobre el piso de la cancha que conectara con la manera de ser y de sentir de esa comunidad.