El tiempo dedicado a transportarte en la ciudad tiene un impacto en tu salud mental

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LA Network
24 marzo, 2024 - Movilidad

En el escenario contemporáneo, el estudio de la salud mental se ha convertido en un tema de interés creciente, especialmente en ciudades densamente pobladas. Identificar todos los factores que inciden en ella es clave para promover estrategias de bienestar y salud pública. Y la movilidad es uno de esos factores.

Sí. Los tiempos que invertimos diariamente en movernos en la ciudad, los medios de transporte que usamos y elementos como el ruido, la contaminación del aire, la congestión de tráfico, la inseguridad, condicionan la salud mental.  En este contexto, una investigación pionera titulada «Patrones de desplazamiento y depresión: evidencia de once ciudades latinoamericanas», ha arrojado luz sobre esta relación entre la movilidad, los desplazamientos diarios y la salud mental.

Los datos para este estudio provinieron de una encuesta realizada por el Banco de Desarrollo de América Latina CAF desde 2016. La encuesta incluye datos transversales de 12.905 personas en 11 ciudades latinoamericanos: Buenos Aires (Argentina), Bogotá (Colombia), Caracas (Venezuela), Fortaleza (Brasil), La Paz (Bolivia), Lima (Perú), Ciudad de México (México), Montevideo (Uruguay), Ciudad de Panamá (Panamá), Quito (Ecuador) y Sao Paulo (Brasil). 

En cuatro de las 11 ciudades (Buenos Aires, Bogotá, Caracas y Fortaleza), las encuestas tuvieron un mayor foco según si los encuestados residían en asentamientos formales o informales. Para cada ciudad, la encuesta incluyó alrededor de 1.000 personas que residían en barrios formales, excepto Ciudad de Panamá, que sólo tuvo 600 encuestados; Para las cuatro ciudades donde se encuestaron los habitantes de los barrios informales, también se incluyeron 500 personas adicionales que vivían en esas zonas. Los datos recopilados fueron sometidos a un riguroso análisis estadístico para identificar posibles correlaciones y patrones significativos.

Los desplazamientos sí pueden detonar la depresión

Uno de los hallazgos más destacados del estudio es la relación entre la duración de los desplazamientos y la prevalencia de la depresión. Según los resultados, aquellos individuos que enfrentan desplazamientos más largos tienden a exhibir mayores niveles de depresión en comparación con aquellos cuyos desplazamientos son más cortos. Este hallazgo sugiere que el tiempo dedicado a los desplazamientos diarios puede tener un impacto significativo en el bienestar mental de las personas.

El primer conjunto de modelos usados en el estudio sugirió que las personas con un tiempo total de viaje más largo tienen más probabilidades de ser evaluados positivamente para detectar depresión. Cada 10 minutos adicionales de viaje se asocia con una probabilidad un 0,5 % mayor de depresión. 

Ser peatón y/o ciclista parece estar asociado con una mayor probabilidad de tener un resultado positivo en la detección de depresión, que ser conductor de un automóvil privado.  Por el contrario, utilizar el transporte público formal se asocia con una menor probabilidad de depresión que viajar en vehículos privados. Específicamente, los efectos marginales sugieren que los usuarios del transporte público formal tienen un 4,8 % menos de probabilidades de mostrar síntomas depresivos que los usuarios de automóviles privados.

Algunos modelos aplicados en la investigación también sugieren que la depresión está igualmente asociada con características socioeconómicas particulares y características del vecindario. Vivir en un barrio con delitos violentos, cerca de vertederos, con edificios abandonados cerca y con el hospital más cercano a más de 10 minutos caminando se asocia con depresión. Sorprendentemente, los residentes de asentamientos informales tienen menos probabilidades de estar deprimidos, en igualdad de condiciones. Finalmente, aquellos que no tienen paradas de transporte formales/informales dentro de una caminata de 10 minutos tienen una mayor probabilidad de depresión.

Otro aspecto importante abordado por la investigación es la disparidad de género en relación con los desplazamientos y la salud mental. Se descubrió que las mujeres tienden a experimentar mayores niveles de estrés asociados con los desplazamientos, lo que puede atribuirse a responsabilidades adicionales, como el cuidado de los hijos y las tareas domésticas, que a menudo recaen desproporcionadamente sobre ellas. Esta disparidad de género resalta la necesidad de políticas y medidas específicas destinadas a abordar las desigualdades en el acceso y la experiencia del transporte público.

El estudio también analiza las diferencias entre las ciudades latinoamericanas en términos de sus sistemas de transporte y su impacto en la salud mental de la población. Se encontró que las ciudades con sistemas públicos de transporte más eficientes y bien desarrollados tienden a tener una menor incidencia de problemas de salud mental relacionados con los desplazamientos. Este hallazgo subraya la importancia de invertir en infraestructura de transporte sostenible y accesible como una medida para mejorar la calidad de vida urbana y reducir la carga psicológica asociada con los desplazamientos diarios.

Además de proporcionar una visión detallada de la relación entre los desplazamientos y la salud mental, el estudio también plantea importantes implicaciones para el diseño de políticas públicas y la planificación urbana en América Latina. Se destaca la necesidad de abordar las deficiencias en los sistemas de transporte público, mejorar la accesibilidad y promover alternativas de movilidad sostenible como parte de una estrategia integral para abordar los desafíos de salud mental en los entornos urbanos.