EuroVelo: 92.000 kilómetros de rutas ciclistas que conectan Europa

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LA Network
6 febrero, 2024 - Movilidad

La bicicleta ha retomado en los últimos años su fuerza como medio de transporte sostenible en las ciudades. La infraestructura ciclista es fundamental para que se mantenga ese uso en aumento. La Unión Europea decidió, desde la década de 1990, unirse a través de ciclorrutas y hoy tiene un proyecto consolidado y que merece ser replicado en otros lugares del mundo. ¿Y qué tal en Latinoamérica?  

La EuroVelo tiene 92.000 kilómetros de rutas ciclables que cruzan por lo menos 38 países europeos. Foto: Ugur Arpaci/Unsplash

El ciclismo urbano ha experimentado un resurgimiento en popularidad en todo el mundo, y la Unión Europea no es la excepción. Con un enfoque en la sostenibilidad, el turismo y la movilidad, la EuroVelo emergió como una red de ciclorrutas ambiciosa y expansiva que conecta países y regiones, brindando a los ciclistas la oportunidad de explorar Europa de una manera distinta y sí se quiere, pausada.

La idea de una red que conectara toda Europa comenzó a gestarse en la década de 1990. El proyecto EuroVelo, iniciado por la Federación Europea de Ciclistas (ECF), se propuso crear una red transnacional de rutas ciclables que abarcara todo el continente. Un primer grupo de trabajo reunido en 1995 en Bruselas (Bélgica), diseñó la primera propuesta de red compuesta por 12 rutas. La visión era proporcionar a los ciclistas la posibilidad de recorrer Europa de manera segura y sostenible, promoviendo así el turismo activo y respetuoso con el medio ambiente.

El 21 de noviembre de 1997 el proyecto fue presentado oficialmente en Logroño (España), por Robert Coleman, director general de Transportes de la Comisión Europea. En 2001 se abrió la primera ruta: La denominada EuroVelo 12, la ruta ciclista del Mar del Norte. En octubre de 2015, en Luxemburgo, todos los ministros de transporte de la Unión Europea firmaron la declaración sobre el ciclismo como medio de transporte respetuoso con el clima, lo que dio un nuevo impulso a la red.

Una red en expansión

Cada ruta de la EuroVelo tiene un tema específico, que va desde la exploración de ríos y costas hasta rutas culturales y travesías montañosas. Foto: EuroVelo

Desde su concepción, la EuroVelo ha crecido de manera constante y hoy en día, tiene 92.000 kilómetros de rutas ciclables que cruzan por lo menos 38 países europeos. Cada ruta tiene un tema específico, que va desde la exploración de ríos y costas hasta rutas culturales y travesías montañosas. Entre las rutas más destacadas se encuentran la EuroVelo 6, que sigue el río Danubio desde el Mar Negro hasta el Mar del Norte, y la EuroVelo 15, que recorre el Rin desde los Alpes suizos hasta los Países Bajos.

La EuroVelo está basada en rutas regionales o nacionales ya existentes o futuras, que formen un recorrido superior a los 1000 km y con el paso por, al menos, dos países. El trazado debe cumplir con algunas recomendaciones:

  1. No tener pendientes superiores al 6 %
  2. Estar pavimentado, por lo menos, en el 80 % del recorrido.
  3. Tener un ancho mínimo que permita el paso de dos bicicletas.
  4. No tener tráfico motorizado o de un promedio no superior a 1000 vehículos al día.
  5. Estar abierto durante todo el año, con posibilidad de avistamiento y hospedaje.
La red aún tiene muchos retos en materia de expansión, conectividad y señalética. Foto: EuroVelo

Aunque la EuroVelo ha alcanzado un nivel impresionante de desarrollo, no está exenta de desafíos. Uno de los problemas más recurrentes es la variabilidad en la calidad y la señalización de las rutas a lo largo de los diferentes países. Mientras que algunas secciones están perfectamente mantenidas y señalizadas, otras pueden carecer de la infraestructura necesaria para hacer que el viaje sea cómodo y seguro.

De acuerdo con el más reciente informe de resultados de 2023, el 66 % (más de 60.000 kilómetros) de la EuroVelo está totalmente desarrollado y hay 8 rutas desarrolladas al 75 % o más. Esto representa un aumento de 2 % respecto al año 2022. El otro tercio (32.000 kilómetros) aún está en desarrollo o en la etapa de planificación. Mejorar estos tramos de la red es una prioridad para el año 2030. La Federación Europea de Ciclistas (ECF) está trabajando con aliados en todo el continente para lograr el objetivo. Las autoridades ciclistas calculan que necesitarían desarrollarse en torno a 4.500 km de EuroVelo al año para alcanzar el objetivo. Hoy la red tiene 17 rutas en servicio.

La coordinación entre países también ha sido un desafío, ya que cada nación es responsable de mantener su parte de la red. Las diferencias en las regulaciones y normativas de ciclismo a menudo generan obstáculos para los ciclistas que cruzan fronteras. A pesar de estos desafíos, la EuroVelo ha logrado avances significativos. En muchos lugares, se han implementado mejoras en la infraestructura ciclista, como carriles exclusivos, señalización clara y servicios para ciclistas. Además, la red ha fomentado el desarrollo económico en las regiones que atraviesa, ya que el turismo ciclista aporta ingresos a comunidades locales a lo largo de las rutas.

En términos de uso, el crecimiento fue del 11 % en 2022, tanto los fines de semana como entre semana, esto en comparación con 2019. El aumento fue mayor en invierno, otoño y primavera que durante el verano, aunque el verano sigue siendo la temporada con el mayor número de bicicletas rodando.

La EuroVelo es una manera maravillosa y sostenible de conocer Europa. Foto: EuroVelo

A medida que la EuroVelo se ha expandido, numerosos países han lanzado iniciativas locales y nacionales para mejorar la experiencia ciclista. Algunos han desarrollado programas de alquiler de bicicletas, instalaciones para el descanso de los ciclistas y servicios de apoyo en caso de emergencias. Otros han invertido en la creación de rutas ciclables dedicadas y en la promoción del cicloturismo como una forma única de explorar sus paisajes y culturas.

La EuroVelo no es un proyecto estático y continúa evolucionando con nuevos desarrollos y extensiones planificadas. A medida que la conciencia sobre la movilidad sostenible aumenta, se espera que más países se unan a la red y que las rutas existentes se mejoren. La EuroVelo ha demostrado ser más que una red de ciclovías; es un catalizador para el cambio positivo en Europa. Otras regiones del mundo deberían seguir el ejemplo.